Bisutería estradense con corazón verde

Rocío García Martínez
rocío garcía A ESTRADA / LA VOZ

A ESTRADA

miguel souto

La firma Pai Presencia vende colgantes con flores y hojas encapsuladas

10 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Todo empezó con un viaje a Colombia que la estradense Alba Rodríguez Eiras hizo en enero del 2018. «Na selva namoreime das cores da natureza, das follas que ía atopando... Recollía as que máis me gustaban e gardábaas nos libros para intentar conservalas», explica. A Alba le gustaría poder traerse a A Estrada un trocito de aquella selva mágica. Al menos simbólicamente. Su pareja le dio una idea: el encapsulado con resinas. Un método que permite conservar hojas y flores en una cápsula en la que parece haberse detenido el tiempo.

De vuelta a casa, Alba probó el sistema y, después de mucho experimentar, decidió hacer de su habilidad un pequeño negocio. «Empecei facendo pezas para min e para regalar e despois, como gustaban, animada pola miña parella e pola miña irmá, decidinme a empezar a vender», cuenta. Así nació la marca Pai Presencia. «Tiña que escoller un nome que me gustara e tíveno claro. En Colombia, no poblado kamsá en Sibundoy, grazas dise ‘pai pai'. É algo que escoitas constantemente. Sempre me gustou e por iso elixín esa palabra. Presencia ten que ver co ioga, no que agora estou moi volcada», comenta.

Pai Presencia ha arrancado con buen pie. Comercializa sus creaciones a través de Instagram, donde ofrece artesanía inspirada en la naturaleza, productos naturales para el bienestar y packs de regalos. Además, también vende sus creaciones en el mercado agroecológico Lusco Fusco de Belvís (Santiago).

Alba, que vive en San Xurxo de Vea, pasa muchas horas en contacto con la naturaleza, en la que busca inspiración para sus creaciones. En cada una de ellas pone un pedacito de su alma.

La artesana recolecta flores, hojas, líquenes, conchas, plumas y algún que otro insecto cuando lo encuentra muerto. Los encapsula en resina transparente y los convierte en pendientes en multitud de formatos, colgantes, collares, palos para el pelo, llaveros, libretas o peines bautizados con los nombres de sus abuelos.

Su creatividad no tiene límites. No obstante, Alba también acepta encargos personalizados. Ha encapsulado un trébol de cuatro hojas y un helecho para una pieza de bisutería en macramé. Cualquier elemento natural es susceptible de convertirse en joya.

Además de encapsulados en resinas, la firma ofrece otros artículos. Fabrica jabones artesanales -como el hidratante de cúrcuma o el de miel con avena y yogur-, velas de cera natural, sacos térmicos de semillas o preparados para infusiones con la espiral de plantas que Alba cultiva en su jardín.

El empaquetado es otro de los grandes aciertos de la marca. La artesana no se limita a envolver las piezas en un papel de regalo cualquiera. Sus envoltorios son en sí una pequeña obra de arte en la que de nuevo echa mano de la madre naturaleza. Las hojas del maíz sirven muchas veces de envoltorio y las flores adornan los paquetes, siempre con una etiqueta escrita a mano. Hasta cuentan los clientes en las redes sociales que les da pena desenvolverlos.

«Gústame moito a decoración. A miña nai tiña a tenda Kontrastes na Estrada e o tema da decoración sempre estivo na miña vida. Ademais estou namorada da natureza. Supoño que eses dous factores inflúen», explica Alba.

La estradense, que acabó hace tres años la titulación de Turismo, está ahora volcada en sus estudios de Naturopatía. «O turismo non era o meu», asegura. En la actualidad compagina su formación con la docencia en la escuela compostelana Avenida 173, donde imparte clases de danza para niños. «A danza sempre me acompaña», confiesa. Lo que ha dejado a un lado de momento es su Obradoiro de Sabores, un taller artesanal de helados con el que triunfó en A Estrada hace dos veranos. «O proxecto estaba pensado máis ben para vender nun carriño, nos festivais, e todo iso truncouse co covid. Non sei que pasará con iso no futuro... Agora estou nunha etapa creativa e estou moi contenta con Pai Presencia. Vaime superbén e gustaríame poder levar as miñas creacións ás tendas», cuenta.