El menú del día del restaurante, directo a casa, a la oficina o la cabina del camión

Rocío García Martínez
rocío garcía A ESTRADA, LALÍN / LA VOZ

A ESTRADA

E CUIÑA

Los hosteleros no pueden ofrecer mesa pero multiplican las opciones de pedidos

08 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

El cierre de la hostelería ya no es un impedimento para seguir comiendo de restaurante. El primero pilló al sector por sorpresa, pero en el segundo los hosteleros tienen recursos de sobra para seguir mimando al cliente. No pueden ofrecerle una mesa. Todo lo demás, sin problema.

En A Estrada, el cierre impuesto ha activado la oferta de menús del día para llevar en muchos locales. Uno de ellos es el Velis Nolis Bistró. Jaume García ofrece una selección de primeros platos a 5 euros y de segundo a 6. Precios anticrisis para una crisis que ya está en el pueblo. «En el cierre anterior tuvimos más ayudas. Esta vez no va a ser igual. Tenemos que hacer algo para salvar los locales porque esta crisis se va a llevar a muchos por delante», reflexiona. Él tiene la suerte de contar con un local pequeño. «He tenido que irme adaptando a la realidad y recortando gastos. En el primer local que tuve en A Estrada tenía 5.000 euros al mes de gastos. Ahora no llegan a 2.000, y el volumen de clientes no es mucho menor», cuenta. En el primer cierre Velis Nolis ofrecía comida para llevar los fines de semana. «Tuvo bastante aceptación. Después de veinte años tengo una cartera de clientes importante», explica. Esta vez, además de comida a la carta -que se amplía con muchos platos de temporada el fin de semana-, también oferta menú del día, adaptándose a todos los presupuestos.

Más que bocadillos

También ha incorporado a su oferta take away el menú del día Casa Regenjo. El menú para llevar con dos platos, pan y bebida cuesta 10 euros y se entrega con todo lo necesario para degustarlo donde se pueda. «O menú do día é unha parte importante do noso negocio. Imos probar a ver que pasa. Fixemos unha reforma no local o ano pasado e hai que pagala», explica José Luis Telmo. «Temos bastantes clientes que son transportistas. Queremos ofrecerlle comida quente, aínda que a teñan que comer no camión. Algún para iso preferirá coller un bocata no súper, pero outros non», aventura.

Otra opción en A Estrada es el menú del día para llevar del restaurante Río Liñares. Dos platos con postre o café cuestan 9 euros, pero hay opciones infinitas de combinación. «Todos los menús incluyen bebida y pan y se entregan en una bolsa de papel, con cubiertos, mantel, servilleta y todo lo necesario para consumirlo en cualquier parte», explica Belén Regenjo. «El miércoles, viendo en la tele la comparecencia de Feijoo, muchos clientes habituales ya nos preguntaron cómo íbamos a hacer. Mucha gente ya se alimentó toda la primavera de bocatas y no quiere volver a hacerlo», comenta.

En Lalín también ofrecerá menú del día Casa Currás, que reabrirá sus puertas y recogerá encargos cada día hasta las 11.30.

Parrillada para llevar

Muchos otros locales, tanto de A Estrada como de Lalín, no ofrecen el formato menú del día, pero si comida para llevar a diario o los fines de semana. Uno de ellos es la Parrillada Villanueva de Lalín. Según explica Moncho Villanueva, el negocio lleva años ofreciendo comida para llevar, sobre todo carnes a la parrilla los fines de semana. En el anterior confinamiento se reforzó esta parte del negocio y ahora volverá a apostarse por ella. «A ver como saímos desta. Din que nos pechan un mes para reabrir e aproveitar o Nadal, pero estas matemáticas non son coma as outras. Estas non son exactas. Ninguén sabe que vai pasar», dice.

PCR a domicilio

En Silleda también hay opciones variadas para pedir la comida, como el Bodegón de Esther, A Taberna do Músico (A Bandeira) o la parrillada A Fonte Valenciaga (Piñeiro), que, tirando de humor en tiempos de crisis, ofrece en las redes sociales PCR a domicilio los fines de semana.

Su peculiar PCR no es ningún test. Es un menú completo que incluye pulpo, churrasco con patatas y recital de tarta de la abuela por 25 euros. El remedio lo llevan a casa los sábados y domingos al mediodía y los sábados por la noche. Hacen reparto en Silleda, A Estrada, Lalín, Cruces, Forcarei, Vedra y Boqueixón, con precios que varían según la distancia. «Nestes tempos duros, o humor que non falte», pregonan. Que tampoco falte el alimento.

La Molinera y Cabanas, compás de espera

Dos de los grandes pilares de la hostelería lalinense, La Molinera y el restaurante Cabanas, han cerrado sus puertas sin aventurarse a entrar, al menos de momento, en el negocio de la comida para llevar.

Ana López, de La Molinera, cuenta que, desde su reapertura el 3 de julio, el restaurante trabajó muy bien. Especialmente en el verano. En otoño, el cierre de las ciudades le afectó de forma importante. «Aquí viene mucha gente de fuera, sobre todo por el cocido», explica López.

De entrada, el negocio no se plantea hacer comida para llevar. «Poco a poco lo iremos estudiando. De hacerlo hay que hacerlo bien. Recoger en el restaurante es más fácil pero mandar para fuera, por ejemplo, no es tan sencillo. Se valorará», dice.

El restaurante Cabanas también está sin servicio por el momento. «Estamos planteándonos hacer comida por encargo para la próxima semana. Recibimos llamadas de gente interesada y estamos valorando posibilidades», comentan desde el local lalinense.