La familia estradense de sidras crece con el lanzamiento de Sidra de Vea

Rocío García Martínez
rocío garcía A ESTRADA / LA VOZ

A ESTRADA

miguel souto

La nueva marca será presentada en la feria que se celebra este sábado en A Estrada

05 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La familia estradense de la sidra sigue creciendo al tiempo que aumentan las hectáreas de manzanos en producción y la fama de A Estrada como capital gallega de esta bebida. En el municipio se producían hasta ahora seis marcas de sidra: Ribela, Peroja, Camino, López Pampín, Torres de Moreda y Sobreira. Las tres primeras, con registro sanitario y con todos los beneplácitos para hacerse hueco en el mercado. A esa media docena de marcas acaba de sumarse una nueva: Sidra de Vea.

Sidra de Vea es un proyecto personal de José Manuel Vázquez Porto. Natural de Santa Cristina de Vea, el estradense viene de una familia en la que la fabricación artesanal de sidra era una tradición que se perdió hace un par de generaciones. «A miña nai contoume que cando ela era nena na casa se facía sidra, pero eu xa non o vin», comenta.

Pese a ello, a José Manuel siempre le tiró la sidra. La crisis fue la que le llevó a dar el salto al lagar. El estradense, que trabajaba como soldador, se quedó hace ocho años sin trabajo. «Vinme no paro e non había a onde ir», recuerda. Decidió entonces sacarle jugo a las plantaciones de manzanos. Exprimió las propias, alquiló muchas e inició plantaciones nuevas. En conjunto, José Manuel llegó a reunir cinco hectáreas de manzanos que se extienden por la zona de Santa Cristina de Vea, Ancorados, Cora o Santeles. En ellas produce en ecológico distintas variedades de manzanas de sidra: desde la rabiosa -autóctona de A Estrada- hasta la regona, la raxao o la durona.

En principio, el estradense empezó a mimar las plantas para vender la manzana. Producía miles de kilos que vendía íntegramente, a través de la cooperativa Ullama, a la sidrería de Estrella Galicia en Chantada, donde se elabora la marca de sidra Maeloc. Con el tiempo, José Manuel volvió a encontrar trabajo en el metal, pero ya tenía en el cuerpo el gusanillo de la manzana. Decidió compaginar ambas facetas y, poco a poco, fue madurando la idea de crear su propia sidra. Y acaba de lanzarse.

La última cosecha fue de las peores. El año anterior había recogido 80.000 kilos. El pasado, la vecería y las plagas la dejaron en 20.000 kilos. La mayor parte acabó en sidrerías ajenas. Pero esta vez José Manuel reservó una parte para crear su propia sidra. Así, con 2.000 kilos de manzana y mucha pasión y dedicación, nació la marca Sidra de Vea.

¿Por qué este nombre? Pues porque Vea es su tierra y porque, pese a ser una de las zonas de más importancia en la producción de manzana y de más tradición sidrera históricamente, hasta el momento su poderío no se había visto traducido en ninguna marca homónima.

José Manuel ha producido 1.500 litros de sidra. Aún no se vende. A la espera del registro sanitario, el productor la testa con éxito en los paladares de familiares y amigos. No obstante, este sábado Sidra de Vea se pondrá al alcance de todos los estradenses en la Feira da Sidra, donde se escanciará junto a las otras marcas locales y a firmas llegadas desde Asturias, Cantabria, la Bretaña francesa o el Reino Unido.