Una marquesina corta el paso a un bar estradense en una inocentada con trasfondo

La Voz

A ESTRADA

cedida

29 dic 2018 . Actualizado a las 08:54 h.

Cuando los propietarios del Mesón da Estrada acudieron ayer a abrir su negocio se toparon con una marquesina de poliespán colocada estratégicamente ante la puerta de acceso. Los dueños desplazaron la estructura -que hasta tenía banco incorporado- para poder abrir. Enseguida cayeron en la cuenta de que era 28 de diciembre e identificaron al autor de la inocentada: un cliente con el que más de una vez intercambiaron pareceres sobre la parada de bus situada justo al lado. Hace años que funciona en la zona una parada oficiosa con buen número de usuarios. Este año el gobierno, aprovechando el repintado de la N-640, la oficializó y anunció la instalación de una marquesina. Los pasajeros aplauden la promesa, pero hostelería y comercio no la quieren ante sus escaparates.