Vecinos de Vea le piden a los Reyes la licencia para usar su cementerio

Rocío García Martínez
rocío garcía A ESTRADA / LA VOZ

A ESTRADA

miguel souto

Las obras de ampliación llevan dos años acabadas pero no se pueden hacer enterramientos

18 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Los vecinos de Santa Cristina de Vea (A Estrada) lo están teniendo muy difícil para descansar en paz. En todos los sentidos. Hace más de una década que el camposanto se les ha quedado pequeño y, pese a todos los esfuerzos para lograr su ampliación, continúan sin tener donde enterrarse.

En el año 2008 ya había más de un centenar de vecinos interesados en construir panteones familiares. Tras un tedioso proceso consiguieron la aprobación de un anteproyecto para edificar 137. Sin embargo, a pesar de contar entonces con todos los informes sectoriales a favor, las trabas administrativas frenaron aquella iniciativa y obligaron a reformularla. No fue fácil. Vuelta a replantear el asunto y vuelta a hacer acopio de informes de todo tipo hasta que en el 2015 la Asociación de Veciños de Santa Cristina de Vea consiguió lo que parecía casi un milagro: la licencia municipal para la ampliación del cementerio, primero para construir 63 panteones y luego para alcanzar los setenta.

Aquel proyecto financiado por los vecinos -con un coste estimado entonces en 157.000 euros- fue la envidia de muchas parroquias que continuaban inmersas en un interminable proceso para conseguir la licencia. La ampliación fue llevada a cabo y los flamantes panteones nuevos llevan dos años acabados en Santa Cristina de Vea.

Pero eso no quiere decir que puedan ser utilizados. Para poder hacer enterramientos se precisa una licencia de primera ocupación que ha de ser concedida por el Concello. Y el gobierno local no puede otorgarla a no ser que el Arzobispado acepte vincular el uso de la licencia a toda la parcela a la hora de inscribirla en el Registro de la Propiedad. La ampliación del cementerio se ha llevado a cabo en una parcela de propiedad de la Iglesia de unas 2,5 hectáreas en la que se encuentran además del cementerio, el templo parroquial, la vivienda del párroco y una zona de prados y de monte. La licencia de ampliación fue concedida para la parcela completa. Según los vecinos, con el compromiso de apoyo del Arzobispado para facilitar la operación. Sin embargo, si el Arzobispado no firma ahora la vinculación del uso para toda la parcela y opta por una segregación previa, esto invalidaría la licencia de ampliación concedida en su día para toda la parcela. Por este motivo, los vecinos le ruegan a la Iglesia su apoyo. Le piden que autorice ahora la vinculación de uso que se necesita y que emprenda a posteriori la segregación si lo cree conveniente.

Aunque desde el Arzobispado les han prometido trato «preferente» para resolver el asunto cuanto antes, los vecinos llevan dos meses esperando respuesta. Entretanto, en la parroquia ha habido ya dos defunciones de personas con panteón propio en la zona de ampliación que han tenido que buscar acogida en nichos de otros familiares.

Los afectados no saben qué hacer para agilizar el asunto. Por eso, aprovechando las fechas, han decidido escribir una carta a los Reyes. Les recuerdan lo bien que se ha portado la parroquia arreglando el tejado de la iglesia y el retablo, llenando de flores el altar o cuidando con esmero el atrio.

Petición con retranca

«Queremos pedirvos que fagades o posible para poder obter a licenza de primeira ocupación da ampliación do cemiterio que ‘relixiosamente’ pagaron os veciños porque, aínda que non hai voluntarios, si que queren ter a posibilidade de utilizalo chegado o momento», piden con retranca.