Incendio bajo control en la residencia estradense

r. g. A ESTRADA / LA VOZ

A ESTRADA

miguel souto

El centro acogió un simulacro en el que se consiguió poner a salvo a los residentes en cuatro minutos

23 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Poco después de las doce del mediodía de ayer, la alarma de incendios saltó en la residencia de mayores de A Estrada. De una de las habitaciones de la primera planta salía humo a borbotones. No había fuego. Había un generador de humo instalado por la empresa Previnem, la adjudicataria del plan de prevención del centro. La firma echó mano de Emerxencias A Estrada y de la Policía Local para llevar a cabo un simulacro de incendio, poner a prueba el plan de evacuación, medir tiempos y corregir las cuestiones mejorables.

En cuanto la alarma comenzó a sonar el personal puso en marcha el plan de evacuación del edificio, en el que residen 35 mayores. La desapacible mañana impidió hacer un simulacro de evacuación a la Praza do Mercado, así que se optó por simular un incendio en la primera planta en el que el plan de acción era confinar a todas las personas del edificio en una habitación situada en la planta baja. Buena parte de los residentes ya se encontraban en la zona social situada en la planta baja de la residencia, así que el medio centenar de personas que se encontraban en ese momento en el edificio -entre residentes, personal o usuarios externos del centro social y de su bar- estuvieron a salvo en tiempo récord. En apenas cuatro minutos. En poco más de cinco llegaron los efectivos de Emerxencias desde su base de Toedo y, tras confirmar que todo el mundo estaba bien, localizaron el foco del supuesto fuego. En este caso no hubo nada que apagar, pero sí hubo que ventilar igualmente y hacer las mediciones correspondientes.

La experiencia sirvió para detectar pequeños detalles mejorables para ganar tiempo ante una emergencia real. Como la localización de las llaves para bajar los pivotes de acceso a la zona peatonal de la Praza do Mercado o el desbloqueo de la puerta que da acceso directo al sótano desde la calle García Barros.

Por lo demás, todos supieron dirigirse al punto de encuentro ordenadamente y haciendo una buena marca de salvamento.