Limpian los lodos de la depuradora que amenazan al río Liñares

Rocío García Martínez
rocío garcía A ESTRADA / LA VOZ

A ESTRADA

rober amado

Los sólidos acumulados en la cámara de carga de la minicentral se retiraron ayer

15 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Operarios de la empresa encargada de la gestión y el mantenimiento de la depuradora de A Estrada, Viaqua, procedieron ayer a la retirada de los lodos acumulados en la cámara de carga de la minicentral de Pina, en el río Liñares. La instalación hidroeléctrica permanece inactiva durante los meses de verano por imperativo legal, para respetar el caudal ecológico del cauce fluvial. La presa se nutre de las aguas del río Liñares y también de las procedentes de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de A Estrada. Cuando la minicentral está en funcionamiento, el agua fluye y los problemas de las aguas procedentes de la depuradora no afloran. Sin embargo, con la central parada, el caudal procedente de la depuradora se estanca en la cámara de carga de la minicentral y genera lodos apreciables a simple vista y que además, en ocasiones, producen malos olores. Con el tiempo, esas aguas estancadas exceden la capacidad de la cámara y acaban buscando salida hacia el río.

Tras la alerta vecinal, los técnicos de la empresa responsable del mantenimiento de la EDAR estradense acudieron ayer al mediodía a supervisar las instalaciones y procedieron a la retirada de los residuos sólidos acumulados en la cámara de carga de la minicentral.

El alcalde estradense en funciones, Juan Constenla, tras abordar el caso con la firma responsable de la gestión, indicó que el problema surge porque el agua procedente de la EDAR -según asegura el agua acumulada en la cámara de carga es agua tratada- «puede contener algún sólido en suspensión» que puede ir decantando en el canal de abastecimiento de la minicentral, donde el agua está parada. Esos sólidos «con la temperatura y el tiempo acaban flotando», explica. Constenla asegura que, en condiciones normales, el caudal del río que abastece la cámara impide que se produzca la decantación «y se acumulen esos pequeños sólidos».

No obstante, cabe recordar, que el respeto al caudal ecológico del Liñares impide que la minicentral de Pina funcione varios meses al año. En ellos es habitual la formación de los lodos que inquietan a los vecinos, que consideran que si el agua estuviese debidamente tratada no deberían formarse.

Los lodos y los vertidos de aguas con residuos fecales al cauce del río Liñares son un problema recurrente sobre el que se debatió ampliamente en A Estrada el año pasado. Entonces, tras las evidencias de unos análisis de muestras tomadas aguas abajo de la depuradora que detectaron incontables colonias de bacterias procedentes de restos fecales, el gobierno local anunció obras de mejora en la EDAR para intentar mejorar su rendimiento y atajar los vertidos al río.

En septiembre del 2017 se adjudicaron a la empresa Viaqua obras de variación en el circuito para que los sobrantes de la depuradora que antes se aliviaban directamente al río fuesen bombeados para devolverlos al inicio del ciclo de depuración para su tratamiento. También se acometieron trabajos para mejorar el proceso de sedimentación.

Sin embargo, las aguas procedentes de la depuradora que terminan en la cámara de carga de la minicentral siguen siendo de aspecto mejorable.

Infradimesionada

Los últimos estudios realizados por el gobierno local apuntan a la necesidad de buscar soluciones más ambiciosas. Costarían bastante más de los 12.000 euros con los que hace un año el Concello puso un parche al problema. La depuradora, construida en el 2005 con capacidad para 10.000 personas, está infradimensionada. Para solucionar este problema se necesita ayuda externa.