Un trabajador denuncia al Concello de A Estrada por recortar los horarios de la plantilla y derrochar en horas extra
A ESTRADA
Un trabajador laboral discontinuo del Concello de A Estrada ha denunciado ante la Dirección Xeral da Administración Local de la Xunta el presunto incumplimiento por parte del Concello de la normativa autonómica que regula los horarios de trabajo del personal de la administración de la comunidad autónoma.
Según el empleado municipal -al que, por las especiales características de su trabajo como socorrista, no se le aplican los recortes de jornada que pide que se investiguen- el Concello permite que sus trabajadores trabajen menos horas de las que les correspondería y luego paga importantes cantidades en horas extra.
El denunciante asegura que el Concello está incumpliendo las instrucciones de la Xunta sobre la jornada de trabajo, que autoriza una jornada de 30 horas semanales en verano siempre que se recupere después el tiempo perdido. Según explica, en A Estrada el horario habitual es de 35 horas semanales -de 8.00 a 15.00 horas de lunes a viernes- y el de verano de 30 horas a la semana -de 8.15 a 14.15 horas-. Sin embargo, según indica, en el caso de A Estrada el tiempo de trabajo perdido con el horario de verano no se recupera después. El denunciante cuenta con un informe de la Secretaría municipal que atestigua que al menos desde el 6 de abril del 2015 no se ha producido la recuperación de horas del horario de verano reconocido por el convenio colectivo del Concello.
El trabajador considera que el Concello podría estar incurriendo en delitos de prevaricación o malversación al permitir deliberadamente la reducción de la jornada laboral fijada para la administración y después gastar fondos públicos en la compensación por las horas extra de trabajo. Según asegura, en solo dos años el Concello de A Estrada gastó 63.623 euros en horas extra.
El denunciante pretende que la Dirección Xeral de Administración Local abra diligencias contra el Concello y depure responsabilidades. Para reforzar su escrito ante este organismo ha solicitado a Intervención un informe motivado en el que se aclare si el hecho de incumplir el horario puede causar perjuicios económicos al Concello. Pide también que se calcule qué ahorro podría lograr el Concello aplicando el horario íntegro.
La batalla sobre los horarios de este trabajador -enzarzado en una espiral de pleitos con el Concello por distintas cuestiones laborales- empezó en 2015, cuando pidió una reducción horaria para poder hacer 35 horas semanales o bien una compensación económica. Al serle denegada recurrió al juzgado, que no apreció discriminación respecto a otros empleados que la disfrutan por ser el suyo, como contratado solo en verano, un caso distinto. Recurrió al TSXG, que ratificó la sentencia y luego volvió a reformular la demanda, pero también sin suerte. Dando por perdido su caso particular, alertó al Tribunal de Contas de la situación de reducción de jornada general, pero este, en función de un informe del propio Concello, no apreció indicios de responsabilidad contable, concluyó que se cumple con la estabilidad y regla del gasto y archivó el caso.