El proyecto está a la espera de licencia municipal para poder iniciar las obras
15 sep 2024 . Actualizado a las 05:00 h.En A Estrada hay a día de hoy dos realidades innegables. La primera es que sobran bajos comerciales, sobre todo más allá del pequeño polígono delimitado por la Farola, la Porta do Sol, el Concello y la Praza da Feira. La segunda, que hay una importante escasez de pisos de alquiler. Conseguir uno nuevo o renovado a un precio decente es prácticamente misión imposible.
Partiendo de estas dos certezas, la promotora Dosemas ha decidido cambiar el chip y destinar a uso residencial los bajos comerciales que tiene libres en la Avenida de Santiago. La empresa, que en la época dorada de la construcción llegó a construir cerca de 2.000 viviendas en el municipio estradense, fue la principal artífice del desarrollo urbanístico de la parte baja de la Avenida de Santiago. En ella Dosemas firmó la construcción de casi todos los nuevos edificios que se despliegan entre la rotonda de la Rúa da Cultura y la de la Escola Infantil Municipal.
Las viviendas tuvieron rápida salida a través del sistema de venta o alquiler, pero a los bajos comerciales les cuesta más arrancar. Algunos fueron vendidos y hoy albergan negocios bien asentados en el barrio, como la ferretería Ferrokey, el bar Invictus o el gimnasio Infinity Home. Pero otros llevan a la venta entre 12 y 14 años y no han conseguido encontrar comprador. Ha sucedido con el bajo contiguo a Ferrokey , que hace esquina con la Rúa da Congostra, y con el que está justo enfrente, al lado del párking en precario habilitado en la Avenida de Santiago.
Según explica el promotor Álvaro Núñez, aprovechando la posibilidad de cambiar de uso los bajos comerciales para transformarlos en viviendas, la empresa ha decidido apostar por esta fórmula en sus dos bajos en venta en la Avenida de Santiago. El que está pegado a Ferrokey ronda los 300 metros cuadrados y el situado enfrente tiene más de 200. La empresa ya ha solicitado el cambio de uso y ha presentado en el Concello los proyectos para acondicionar tres pisos en el bajo más grande y dos en el otro. Serán viviendas de entre dos y tres habitaciones que se ofertarán en alquiler. «A vivenda parece que ten máis saída. Nós temos 14 ou 16 en aluguer no edificio que está fronte á escola infantil e están todas ocupadas», explica Álvaro Núñez. «E máis houbera para alugar... Alúganse fenomenal. Incluso hai lista de espera por se marcha algún inquilino», explica el empresario.
«Tiñamos os baixos aí parados e agora decidiuse convertelos en vivendas de aluguer pola demanda que hai. O proxecto xa está listo e estamos esperando a concesión da licenza municipal para comezar as obras», cuenta.
El acondicionamiento de los bajos como viviendas costará más de 400.000 euros, según los cálculos de la promotora, que asumirá la obra con la contratación de profesionales autónomos.
La firma Dosemas tiene en propiedad varios solares sin edificar en el casco urbano estradense. No obstante, a corto plazo no tiene previsto construir. «Os materiais custan hoxe un 60% máis que hai catro anos, faltan profesionais en condicións e ademais o cliente non ten 50.000 euros de fondos propios para comprar unha vivenda. Hoxe construír igual che costa 1.200 ou 1.500 euros por metro cadrado. O que subiron os materiais é de medo. Construír xa costa máis do que unha familia pode pagar por un piso», explica Álvaro Núñez.