La socialista Paula Fernández retoma la alcaldía de Silleda a pesar del plantón del BNG

David Cofán Mazás
David Cofán SILLEDA / LA VOZ

DEZA

Miguel souto

Los ediles nacionalistas no acudieron a la toma de posesión y acusaron al PSOE de usar el Concello como «trampolín para as súas ambicións persoais»

22 ene 2024 . Actualizado a las 17:52 h.

Paula Fernández Pena (1971) tomó posesión como alcaldesa de Silleda once años después de su renuncia tras ser elegida senadora. La sesión plenaria estuvo marcada por la ausencia de los dos ediles del BNG, lo que supuso que fuese elegida por mayoría simple, haciendo valer los votos de los seis concejales que obtuvo el PSOE en las elecciones municipales y que los sitúan como la fuerza más votada en este concello de 8.876 habitantes.

Fernández Pena, concejala de Urbanismo, Medio Ambiente y Promoción Económica, fue la candidata a la alcaldía propuesta por los socialistas silledenses después de la renuncia del anterior regidor, Manuel Cuíña, quien dio un paso a un lado tras incorporarse a la candidatura provincial del PSdeG-PSOE como número seis. Una circunstancia curiosa, ya que fue precisamente la nueva alcaldesa quien cedió el bastón de mando a Cuíña en el 2013.

«Retorno a este posto máis preparada, co poso de madurez que da a idade, e cas mesmas gañas de traballar que tiña no 2007», afirmó emocionada. Sabedora de que no le espera un mandato sencillo y tratando de limar asperezas con un BNG que será clave para la gobernabilidad del municipio, Fernández Pena no quiso cargar tintas por su ausencia. «Somos dúas forzas políticas chamadas a entendernos, e con independencia deste xesto, manteño a posición que se trasladou ao inicio deste mandato: mans tendidas para chegar a acordos», expuso.

Ignacio Maril, portavoz del PP, también se postuló a la alcaldía, obteniendo únicamente los votos de sus concejales (5). «O que se mostra é unha descomposición do grupo socialista que non é bo para Silleda. Así o refrenda a ausencia daqueles chamados a ser os compañeiros e grupo que soporte a gobernabilidade do Concello», esgrimió el candidato popular, que calificó de «falta de respeto» la no presencia de los dos concejales del BNG.

«Un circo»

Media hora antes de comenzar la toma de posesión, los ediles del BNG Erea Rey y Xerardo Díaz anunciaron la decisión de no acudir al pleno, trasladando su malestar por lo que consideran «un circo que dura seis meses e do que non queremos participar». Los nacionalistas hacen referencia no solo a este movimiento a causa de las autonómicas, si no a la dimisión de Manuel Cuíña este verano después de que el BNG votase en contra de dos dedicaciones exclusivas, revocada días después tras llegar a un acuerdo.

«El xa tiña pensado abandonar o cargo moito antes de que rematase o mandato. Despois do esperpento que montou cando fixo unha non dimisión, queda claro que xa tiña pensado non só non esgotar o mandato, senón nin tan sequera inicialo», declaró Erea Rey.

La portavoz del BNG apuntó que esa decisión «tensionou a situación política»» y acusó al PSOE de «enganar aos votantes» al presentar una lista electoral que luego no respetó, ya que Fernández Pena iba en el cuarto puesto. Asimismo, recordaron que la alcaldesa de Silleda acudió a las últimas elecciones generales como número cuatro en la lista por Pontevedra y que «podería saír elixida deputada en calquera momento» —el PSOE obtuvo 3 escaños en esta provincia—. «Parece que este grupo político utiliza o Concello como unha especie de trampolín para as súas ambicións persoais», añadieron.

Dos mujeres al frente

La regidor agradeció la «xenerosidade infinita» de los dos ediles que le precedían en la lista. La número 2 es Mónica González, que ejercía de alcaldesa en funciones y que retoma el cargo de teniente alcalde. Fernández Pena incidió en el hecho de que por primera vez dos mujeres liderarán el gobierno del municipio. «Cando se xuntan dúas mulleres imparables, que se prepare o mundo», declaró.