El PP recuerda el batacazo del 2015 en Lalín y llama a los suyos a perseguir hasta el último voto

Rocío García Martínez
rocío garcía LALÍN / LA VOZ

DEZA

cedida

Crespo presumió de hilo directo con Rueda con una demostración en vivo ante millar y medio de simpatizantes

21 may 2023 . Actualizado a las 22:23 h.

No hay que confiarse. Ese es el mensaje que el PP de Lalín repitió hasta la saciedad en el macro mitin celebrado este domingo en el Lalín Arena. Lo dijo el conselleiro Román Rodríguez, lo repitió el presidente provincial del PP, Luis López, y lo subrayaron el presidente del PP gallego y de la Xunta, Alfonso Rueda, y el propio candidato a la alcaldía, José Crespo, que es el que mejor lo sabe de todos.

En el 2015, el PP de Lalín tenía 14 ediles y soñaba con uno más. Las encuestas le daban alas para hacerlo, pero las urnas le jugaron una mala pasada. Los populares perdieron cuatro concejales y el vuelco electoral colocó a Rafael Cuiña (Compromiso por Lalín) en la alcaldía y al PP en la oposición.

Crespo aprendió la lección y se puso las pilas. A Alfonso Rueda, sus palabras le quedaron grabadas. Las repitió ayer ante las 1.500 personas que acudieron al mitin: «Non me ha comer a terra sen volver a ser alcalde de Lalín». Tenía razón. En el 2019 Crespo volvió al gobierno, pero la lección no se le ha olvidado todavía.

La historia vuelve a repetirse. Algunas encuestas vuelven a darle una holgada mayoría al PP, pero los populares no se fían. «Cero confianza», recomendó Román Rodríguez. «Hai que buscar ata o último voto e traballar xuntos petando en todas as portas e en todas as casas», dijo. «Que non se confíe ninguén. Aquí xa pasou e é máis sinxelo de entender. As enquisas é mellor que saian a favor, pero o que vale é acelerar», añadió Rueda.

Para reforzar el lado más humano de Crespo, en el acto se proyectó una entrevista en la que el candidato respondía telegráficamente a 35 preguntas de toda índole. Pepe Crespo se declaró devoto de Juan Pardo, de Laxeiro y del cocido y desveló que no es amigo de la pizza y prefiere la tortilla sin cebolla. En el plano político apostó por una mayoría absoluta holgada del PP y definió a sus rivales en pocas palabras: «Rafa Cuiña: un rival, que non enemigo; Paco Vilariño: un vello conocido da contienda política de hai moitos anos e Alba Forno: unha rapaza do PSOE que non sabe o que é o PSOE».

Crespo presumió de inversiones y proyectos y de un equipo válido y trabajador. «Do traballo sae todo. Oíno desde pequeno», dijo. Aseguró que «estes catro anos nos partímonos a cara, sen vacacións e ás veces sen fins de semana, para sacar os proxectos adiante» y se felicitó por tener hilo directo con Rueda en una demostración práctica en directo. El teléfono del presidente sonó y Rueda dijo: «Nótase que Pepe está hoxe relaxado e feliz, que chama a horas normais». «Un alcalde así é un tesouro para o seu concello», aseguró.