Ayer por la mañana dio comienzo en A Bandeira el derribo de la estructura de la conocida como Praza de Pichel. Una construcción de 1950 que se convertirá, una vez terminen la sobras, en un espacio de uso público de un total de 604 metros cuadrados. «Hoxe por fin, despois de anos con negociacións fallidas e que se retomaron fai meses coa propiedade, o adecentamento desta zona será unha realidade», indicó el alcalde de Silleda, Manuel Cuíña.
El gobierno municipal firmó un acuerdo con los propietarios por la que esta parcela se convertirá en un espacio de uso en el que se instalarán equipamientos móviles deportivos para los jóvenes, como por ejemplo un skate park, que completará la oferta en patinaje prevista con la ampliación en la plaza Juan Salgueiro. «Esta cesión é un paso clave para que nun futuro a parcela poida ser adquirida polo Concello», afirmó Cuíña.
En este convenio el Concello asume todas las actuaciones necesarias para adecuar, acondicionar y mantener el terreno para el fin que se pretende, incluyendo además las obras de acondicionamiento y preparación del solar existente.
Por seguridad, las obras de demolición provocan el corte del tramo de la rúa do Parque desde el cruce con Ramón Valenzuela hasta la calle Lourás.