El Construcciones Riveira EDM A Estrada visita esta tarde a partir de las 20.00 horas la cancha del Marín, uno de los gallitos de la competición, que junto con el Chantada está enfrascado en un mano a mano por el ascenso a la LEB Plata. Las diferencias entre equipos son evidentes. Solo con mirar la plantilla del Marín y el número de entrenamientos a la semana ya habla de un conjunto prácticamente profesional.
Sin embargo, el EDM no teme ni a Zach Monaghan ni a Van Wijck, las principales armas pontevedresas. El equipo que entrena David González se plantará con la misma hambre que ante cualquier otro rival. «Si estamos bien les vamos a apretar mucho. En A Estrada sufrieron mucho para ganar y si no llega a soplar el aire del arbitraje hubiera estado todo muy ajustado», afirmó el entrenador.
Las derrotas de los últimos encuentros no bajan la moral de la plantilla. González aseguró que están haciendo «un temporadón» y valoró positivamente el carácter ganador y los esfuerzos de la plantilla. «Tiene mucho mérito lo que estamos haciendo. Como club sabemos que esto es un proceso y los procesos llevan tiempo. Veo al equipo competitivo en el 60 o 70 % de los partidos», explicó. Asimismo, apuntó que no está preocupado por el devenir de las últimas jornadas.
Ausencias destacadas
Durante toda la campaña el EDM ha trabajado con una plantilla corta, dentro de sus posibilidades. Las lesiones han menguado más si cabe el equipo, teniendo contra el Marín tres bajas seguras y la duda de Chaiti, que se está recuperando de un problema muscular. Anxo afronta su último partido de baja por un esguince y Samu y Juanma ya no estarán para lo que resta de campaña.