La Fundación Luis Seoane acoge la muestra «Manancial de sombras», con una veintena de obras del artista dezano sobre lienzo o papel de arroz
04 feb 2023 . Actualizado a las 05:00 h.En Manancial de sombras, la reciente exposición abierta por el artista Xulio García Rivas (Borraxeiros-Agolada, 1947), podemos admirar una veintena de sus últimas creaciones con tintas chinas sobre lienzo o papel de arroz. Sutiles creaciones del creador afincado en A Coruña que cuelgan en las paredes de la Fundación Luis Seoane hasta el día 9 de abril, en una muestra comisariada por Sara Donoso. Una selección de piezas de distintos formatos datadas entre el 2016 y el 2022 donde subyacen las influencias presentes en el artista dezano, desde el expresionismo abstracto cargado de lirismo a la pintura taoísta o reminiscencias de Zao Wou-Ki, sin olvidar estilos musicales como el barroco o el jazz.
La propuesta expositiva de García Rivas se realizó de forma específica para la sala principal de la Fundación Luis Seoane. Este espacio de la institución coruñesa permite acoger obras de gran formato, ya que alguna supera los cuatro metros de altura. En su personal visión del paisaje no faltan reminiscencias de otros pintores como Monet, Goya o Caspar David Friedrich. Como se destaca en el catálogo de la muestra, sin dejar de lado sus señas de identidad de años el pintor dezano incorpora esos nuevos intereses para investigar con la tinta china o el comportamiento de distintos soportes y combinaciones matéricas.
«Como espectadores podemos deleitarnos nese territorio de indagacións lumínicas forxadas baixo a potencia simbólica do branco e negro, introducirnos entre os titubeos da pintura para explorarmos os seus matices, as súas nebulosas veladuras, o seu fluír», se destaca sobre esta muestra, con paisajes llevas a su esencia más pura e ínfima. La comisaria de la exposición, Sara Donoso, recoge en la publicación que las propuestas de García Rivas «móvense entre o contido e o espontáneo. Hai certo espírito romántico que se abre paso cara a unha travesía entre os ecos da paisaxe». Todo ello con una visión más experimental y de comunicación directa con el lienzo, «establecendo lazos entre os seus intereses estilísticos e as formas contidas na súa memoria para estimular unha creación máis espontánea».
Sara Donoso remarca la contención cromática de las últimas obras de García Rivas, solo interrumpida por algunos detalles sutiles en ocre o magenta: «o branco, o cru do papel ou do lenzo, actúa como a luz que emerxe dalgún lugar máis profundo que a cor, como se o sol tornase máis pálido o ceo para convidar a pintalo novamente». En A Coruña se pueden admirar estos días piezas como O que se escoita na montaña, del 2022, donde «a monumentalidade do formato convérteo nun amplo campo de indagación plástico, un exercicio de veladuras e derramos onde a man espreme o fluír da tinta e o lenzo compón o resto da atmosfera coas súas grandes superficies núas».
Creaciones que acumulan sensaciones y donde vibra la musicalidad, casi como «unha partitura estática que, calada, retén o estalido do seu movemento», resalta Sara Donoso. Y como concluye en su texto del catálogo, el pintor busca «despoxar a forma de todo o accesorio até chegar a insinuala, até alcanzar a raíz da súa realidade».
Un catálogo que se convierte en una creación artística
El catálogo de la exposición, del que se editaron tan solo doscientos ejemplares numerados y firmados por García Rivas, se convierte en sí mismo en una obra de arte. La portada de esta delicada publicación, en un atractivo e inusual formato, recoge parte de la intervención artística del pintor que fue recogida documentalmente en un vídeo y fotografías. Además del texto de la comisaria de la muestra y la propia reproducción de la veintena de piezas expuestas en la Fundación Luis Seoane, también aparecen interesantes artículos a cargo de Ánxeles Penas y Juan Antonio Martínez-Casanueva sobre el pintor y su obra.