Lalín y A Estrada copan las mayores inversiones en los próximos presupuestos de la Xunta para el año 2023. Sin embargo, los alcaldes de Silleda, Vila de Cruces, Agolada y Forcarei han mostrado su indignación por la falta de partidas consignadas por el Gobierno autonómico en sus respectivos ayuntamientos, y trabajan en iniciativas grupales e individuales para exigir que se tengan en cuenta las necesidades de sus vecinos. La primera acción fue una reunión de los regidores que se sienten «prexudicados por uns orzamentos da Xunta que deixan fóra moitas necesidades nos nosos concellos, e que afectan a uns veciños que por votar libremente e diferente a quen goberna xa non son atendidos», sentenció el alcalde de Silleda Manuel Cuíña.
El regidor trasdezano, muy crítico por la falta de inversiones en su municipio, anunció que no descartan emprender medidas reivindicativas en común pero también alguna individual como una férrea lucha para que se mejoren las instalaciones del colegio silledense. «É o máis vello da comarca, ten 350 alumnos e aos baños teñen que entrar de lado e a metade das fiestras que repuxeron son de segunda man. Os cativos non se merecen isto», remachó Cuíña.