El albañil que se sacó la ESO a los 38 años y cumplió su sueño de trabajar como carpintero

Rocío García Martínez
rocío garcía A ESTRADA / LA VOZ

DEZA

cedida

El estradense cursó el ciclo de Madera en el IES Antón Losada

21 jun 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Nunca es tarde para darle un giro a la vida y poner rumbo a la felicidad. Lo sabe bien Marcos Carballeda Cachafeiro, un estradense que a los 38 años se decidió a volver a las aulas para cumplir su sueño de cambiar de trabajo.

Marcos, que es natural de la parroquia de Tabeirós, trabajaba en la construcción desde que era un chaval. De pequeño no le tiraban mucho los libros, así que nada más terminar la EGB se subió al andamio. Su padre trabajaba en el gremio y él se había curtido echándole una mano en los veranos. Marcos no le dio más vueltas a su futuro. Simplemente dejó el colegio y se puso la funda de albañil para asegurarse un sueldo. La inercia del día a día le llevó a trabajar 17 años en un sector que no acababa de convencerle del todo.

Un buen día tomó la decisión de estudiar Secundaria por libre. Tenía 38 años cuando se matriculó en la ESA (Educación Secundaria para Adultos) con la esperanza de cambiar de trabajo. «Tiña o graduado, pero quería ter uns estudos para poder cambiar de traballo. Non quería andar sempre á chuvia», cuenta.

El arranque del curso no fue fácil. «Non estaba afeito a estudar, pero todo foi poñerme e nun mes xa collín a dinámica», cuenta.

La ESA la sacó sin problemas. Después, aprovechando una temporada que estaba sin trabajo, se matriculó en el ciclo medio de Madera del IES estradense Antón Losada Diéguez. Tenía algunos ahorros y encargos puntuales de fin de semana en el sector de la construcción. «O ciclo xa me enganchou desde o primeiro momento, porque a primeira parte era bastante manual. Gustábame moito», cuenta. «Xa durante o primeiro ano de formación me chamaron no verán para traballar na firma Santos, por aumento da produción», explica.

En el segundo curso tuvo tres meses de prácticas en la Carpintería Neira y, al terminar, estuvo otros tres meses en la carpintería Estelar, también por aumento de producción. Al concluir el contrato lo volvieron a fichar en la fábrica de cocinas Santos, donde lleva más de dos meses contratado a través de una ETT.

«Traballo non me faltou e aquí estás ao enxoito e non andas ao frío. Ademáis, contratado pola ETT, cobras bastante ben. Poden ser uns 1.600 euros ao mes, con vacacións e pagas», explica.

Marcos anima a los jóvenes indecisos a seguir su senda. «O meu consello é que fagan o ciclo sen dubidar, porque traballo hai. Hai bastante demanda. Non sei que pasará no futuro polo tema da guerra e a subida de materiais, pero de momento hai. O ciclo ábreche moitas portas. Sen ciclo non te colle ninguén. Iso si, hai que matricularse no ciclo e aproveitalo. Non apuntarse por apuntarse», advierte.