Mobilidade evaluará el coste de aplicar rebajas similares a la AP-9, como el viaje de vuelta gratis, para trasladar la propuesta al Gobierno central y que se activen en 2022
23 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.La Xunta realizará un estudio sobre el coste que supondría aplicar en la autopista AP-53 entre Santiago y Dozón las mismas bonificaciones que existen en la actualidad en la AP-9. Ese informe económico servirá de base para presentar una enmienda a los presupuestos del Estado para el 2022, con el fin de que se puedan introducir esas rebajas en los desplazamientos ya el próximo año. Esta medida se consensuó ayer entre la conselleira de Infraestruturas e Mobilidade, Ethel Vázquez, acompañada de los delegados territoriales de la Xunta en Pontevedra, Luis López, y Ourense, Gabriel Arén, con una veintena de alcaldes y representantes municipales de los concellos por donde discurre la AP-53, atendiendo una petición cursada por el regidor de Lalín, José Crespo.
Desde la Xunta y los concellos se acordó hacer frente común para conseguir una rebaja en las tarifas de la autopista que une Santiago con Ourense, entre las más caras del territorio nacional. Ahora se analizará el impacto económico que supondría aplicar el modelo de bonificaciones de la AP-9 para trasladar una demanda al Ministerio de Transporte y que se pueda copiar en la AP-53. ¿En qué consistiría? De replicarse esas iniciativas habría regreso gratis para los vehículos ligeros que regresen en veinticuatro horas, así como una reducción del 20 % adicional para los que realicen al menos una veintena de viajes al mes y del 20 % para los vehículos pesados.
Una vez se disponga de ese estudio económico a elaborar por la consellería, se convocará de nuevo una reunión con los alcaldes afectados para presentarles los resultados antes de remitirlos al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana con esa petición de bonificaciones. Ethel Vázquez incidió en el alto coste de la AP-53, que carece de ningún tipo de bonificación, ni siquiera para los usuarios recurrentes, una situación que la convierte en un caso excepcional. Además, resaltó que aplicarlas supondría un coste muy por debajo del que suponen las rebajas en la AP-9, pero «os beneficios para os cidadáns e para o territorio serían enormes».
Acuerdo parlamentario
Para la conselleira, el acuerdo unánime adoptado por el Parlamento de Galicia para reclamar esas reducciones en la AP-53, junto con el menor impacto para las arcas estatales, debería encontrar eco en Madrid. Insistió Vázquez en que se trata de una demanda social, de los concellos y la Cámara gallega, donde se aprobaron iniciativas de distintos partidos en esa línea. Remarcó que la citada autopista resulta clave para la vertebración interior de Galicia, principal eje entre Santiago y Ourense y esencial «para a competitividade de municipios como Boqueixón, Vedra, Silleda, Lalín, Dozón ou Piñor». Lamentó que ahora no se cumpla esa función vertebradora.
En la reunión celebrada en Santiago participaron alcaldes tanto del PP como del PSOE e independientes. Estuvieron los regidores José Crespo (Lalín); Manuel Cuíña (Silleda); Rubén Quintá (Rodeiro); Adolfo Campos (Dozón), Luis Taboada (Vila de Cruces); José López (A Estrada); Carlos Martínez (Vedra); Manuel Varela (Chantada); Javier Varela (Antas de Ulla); José González (Piñor); Francisco Fumega (O Carballiño); José Luis Valladares (San Cristovo de Cea); José Manuel Iglesias (Maside); Manuel Vázquez (Punxín); Manuel Cerdeira (O Irixo); y un concejal de Boqueixón.
Crespo incidió en la preocupación social por el precio y la demanda de ajustes desde 2006
El regidor de Lalín había cursado la petición a la conselleira de un encuentro para analizar el elevado peaje de la AP-53. Lo hizo tras el último acuerdo unánime del Parlamento gallego para instar al Gobierno central a aplicar bonificaciones. José Crespo agradeció la deferencia de Ethel Vázquez con los alcaldes, recordando que la preocupación por las altas tarifas de la autopista «é un asunto de vello, dende o 2006 levamos loitando por unha redución da peaxe». Incidió en que se trata de la más cara de Galicia y entre las más costosas en España, para incidir en la preocupación social por ese precio. Crespo lamentó que las muchas mociones aprobadas aún no surtiesen efectos, congratulándose de la posición compartida por alcaldes de todo signo político. Una «sintonía perfecta porque todos temos o mesmo problemas e queremos a mesma solución», dijo, remarcando los 6,05 euros que cuesta a los vehículos ligeros por viaje.