La oposición tilda de injusta la tasa de 30 euros a ganaderos por la retirada de plásticos agrícolas

O. P. LALÍN / LA VOZ

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CxL, PSOE y BNG subrayan que no es de recibo pagar lo mismo con 11 vacas o 300 y demandan que no se imponga

13 oct 2020 . Actualizado a las 20:58 h.

La oposición de Lalín tilda de injusta la tasa de 30 euros anuales anunciada por el gobierno local para ganaderos con más de 10 vacas por la retirada de plásticos agrícolas. El edil de CxL Fernando Vilariño considera la medida como «unha nova iniciativa de destrucción da gandeiría e do rural», y cree que el PP demuestra una vez más «moi pouca sensibilidade por un sector xa moi machacado, e ao que a crise do covid-19 está afectando como aos demais. En tempos de necesidade, o PP de Crespo apreta máis aos gandeiros», con una tasa que se añade al catastrazo ?diseñado por los populares, indica? que sufrieron ya las economías del rural de Lalín.

Añade Vilariño que no es de recibo que paguen lo mismo explotaciones de 500 vacas que las de 10, y mucho menos que el Concello diga que es inasumible el coste «cando ten a caixa chea e sen débedas, grazas á xestión económica do goberno de Cuíña». Pregunta a Crespo y Souto cuántas sorpresas más, en modo de impuestos y tasas, esperan al rural de Lalín gracias a políticas del PP, y si no sería más razonables que ese costo lo asumiese al menos la Xunta. Dice que el gobierno local «está máis pendente de subir os seus soldos mentres poñen máis impostos aos gandeiros, o cal é unha vergoña intolerable», y llevará a pleno que no se cree esta tasa.

En términos similares se expresan PSOE y BNG. Los socialistas apunta que la tasa «vaille meter a man no peto ao campo», con sobrecoste a las pequeñas y medianas explotaciones al hacer tabla rasa con una tarifa general de 300 euros. En una explotación de 12 a 40 vacas, que generan de 100 a 200 kilos de plástico, por el precio apuntado por el Concello (100 euros por tonelada) pagarían 10 o 15 euros, no los 30 marcados. Exigen por eso la retirada de una medida «con absoluto afán recadatorio na liña permanente do que Crespo nos ten acostumados».

Vilariño (BNG) cree que el acuerdo pudo tomarse con presidentes de cooperativas, pero muchos socios discrepan por este incremento de presión fiscal a un sector estratégico en un momento delicado. Contrapone el modelo del anterior gobierno local, con rebaja del IBI al mínimo, desaparición de plusvalías y congelación de tasas cuatro años, con el PP que incrementa la presión fiscal sobre el sector ganadero, y además «beneficiando aos que máis teñen» al pagar lo mismo con 11 vacas que con más de 300.

PSOE y BNG cuestionan los altos salarios del gobierno municipal mientras al tiempo se dice que no hay fondos para la recogida de plásticos de silo.

Crespo busca financiación externa y anuncia que no se cobrará la tasa

Un día después de que el Concello diese a conocer la medida acordada por los concejales César Reboredo y Avelino Souto con presidentes de cooperativas, el alcalde José Crespo aseguró ayer que la tasa no se cobrará. Apuntó que mantuvo ya conversaciones en la Consellería de Medio Ambiente para buscar una financiación externa que permita al Concello afrontar el sobrecosto de la recogida de plásticos de silo sin que los ganaderos tengan que pagar por ello. Pretende también demandar apoyo económico de la Diputación, e incluso baraja la opción de buscar un espónsor que cubra el desfase por el incremento de costes del servicio. Pero descarta el abono de las en torno a 350 explotaciones que calcula tendrían que pagar. Eso sí, recuerda a los ganaderos que el plástico debe depositarse limpio, sin tierra ni silo en su interior.