El coordinador de CxL, Rafael Cuíña, tildó ayer de «exercicio sumo de cinismo» la actitud del regidor lalinense en el acto del vivero de empresas con la presidenta de la Diputación. Recordó la «guerra permanente» de José Crespo contra Carmela Silva por esas instalaciones. «Chegouna a acusar de neglixente, de mentirosa en relación aos prezos, de pensar que os de Lalín somos tontos», incidió Cuíña, considerando que «pese a escenificacións forzadas, Silva non esquece todo isto, e por desgraza Lalín paga a actitude de Crespo durante catro anos contra a presidenta da Deputación». Y destacó la colaboración mantenida con Silva durante el anterior mandato.
Cuíña también se pregunta «onde queda a petición de prezos sociais que facía Crespo en visitas case clandestinas ao vivero?» y recordó declaraciones de Silva del 2015 donde achacaba la responsabilidad de la paralización del vivero de empresas al anterior presidente, Rafael Louzán, y a José Crespo.
Mancomunidade do Deza
Respecto a la Mancomunidade do Deza, pedirá al secretario un informe sobre la legalidad de que la maquinaria estuviese en Cruces tres meses perjudicando a Lalín.