El portero Yago cerró el capítulo de renovaciones y el club busca dos refuerzos
21 jul 2020 . Actualizado a las 05:00 h.El A Estrada Futsal Inversia se convirtió este sábado en el equipo del municipio que militará en una categoría superior la próxima temporada. El ascenso a Segunda B supondrá un previsible incremento de costes y el club azulón ya se pone manos a la obra para buscar financiación. Con el sueño cumplido y las consiguientes celebraciones, ahora se está a la espera de cubrir el presupuesto necesario así como cerrar una plantilla que prácticamente está vertebrada. El presidente de la entidad estradense, Rafael Vázquez, destacaba que renovó el 95 % de los jugadores, el último el portero Iago, que tenía una oferta del Noia, precisamente en la mañana de ayer.
En estos momentos son doce los jugadores con los que cuenta Paco Garabal para el proyecto deportivo 2020-2021, con la única baja de Carlos, que ya no entraba mucho en los partidos y que tenía dificultades para entrenar por motivos laborales, después de haber hecho el año anterior un esfuerzo y el favor de acudir para ayudar al equipo. Restan por incorporarse un cierre y un ala. Hay ya nombres para esos puestos pero su fichaje está congelado en espera de resolverse cuestiones de compatibilidad con sus horarios de trabajo y en función de cuándo arranque la liga.
Rafael Vázquez reconocía que había quedado muy articulado el equipo tras los fichajes para la temporada recién concluida. «Los nuevos jugadores funcionaron muy bien y solo queda reforzar ese par de posiciones, porque además tenemos a los dos mejores porteros de la categoría», destacó el presidente del club estradense. Ya abordó con el alcalde, José López, la posibilidad de que aumente el apoyo económico del Concello para la campaña en Segunda B, descartándose organizar una recepción oficial por el ascenso a causa del covid-19.
Respecto al partido ante el Lugo Sala donde se logró subir de categoría, tras empatar a un gol y dilucidarse el choque en los penaltis, Vázquez reconocía que hicieron una mala primera parte para mejorar en la segunda y tener ya opciones de victoria, aunque especialmente en la prórroga. «Tocó sufrir bastante pero supimos aguantar y ellos con presión arriba todo el partido, mientras nosotros optamos por esperar atrás, terminaron peor en lo físico aunque tenían más jugadores», dijo. Después se desató la euforia colectiva, además de organizarse una cena de confraternidad que estaba igualmente prevista como fin de temporada.
La liga 2020-2021 por el momento es una total incógnita. No se sabe cuándo comenzará ni el número de grupos en que se dividirá la Segunda B. Rafael Vázquez confía en que se haga un grupo gallego, lo que evitaría incrementar en demasía los costes por desplazamientos. Máxime cuando saben que encontrar patrocinios va a ser una odisea en tiempos de coronavirus. Pero la inyección de moral seguro que contrarresta las dificultades.