Dicen que las plantas de recogida generarán más gastos y contaminación que beneficios
07 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.El director xeral de Gandaría, Agricultura e Industrias Agroalimentarias, José Balseiros, se reunió este jueves con un grupo de ganaderos estradenses interesados en conocer todos los detalles sobre la nueva Política Agraria Común (PAC) y sobre la futura ley que regulará la gestión de purines y estiércoles de las explotaciones. En el encuentro, al que asistió también el alcalde de A Estrada, José López, los ganaderos hicieron notar su disconformidad con la nueva legislación sobre los purines.
Según explicaron al finalizar la reunión, la Xunta contempla la creación en Galicia de cuatro plantas únicas para el tratamiento de purines a las que los ganaderos tendrían que trasladar los excedentes que no reutilicen en sus tierras de cultivo. En principio, estas plantas estarían situadas en las zonas de Xinzo, Deza, Terra Cha y Santa Comba.
Los estradenses consideran que no se puede dar el mismo trato a los excrementos de granjas avícolas o de porcino que a los de las explotaciones de vacuno, que cuentan con terrenos que pueden ser abonados con los purines o estiércoles generados en la actividad diaria. «Din que é por un tema ecolóxico e medioambiental, pero o traslado dos puríns a esas plantas vainos xerar máis gastos e máis contaminación que outros sistemas», auguran. «En principio dinche que a recollida vai a ser a custe cero ou simbólico, pero é coma sempre, unha vez que estás no sistema empezan a subir as taxas», prevén.
Los ganaderos locales propusieron a Balseiros que se abra una línea de subvenciones para que las explotaciones puedan crear sus propios separadores de purín, separando el agua de la materia orgánica, que podría compostarse como abono para darle salida en los propios cultivos vinculados a la explotación. No obstante, la Xunta aboga por poner a funcionar las cuatro plantas centrales en una primera fase. En una posterior podría habilitar las subvenciones para la instalación de separadores en determinadas explotaciones.
Aplicación con tubos
Los estradenses discrepan también con la normativa que obligará a aplicar el purín de vacuno en la tierra con un sistema de tubos. «Non hai cientificamente nada que probe que exista unha diferenza acusada entre botalo así ou en abanico. En cambio facelo co sistema de tubos suponnos unha inversión de 10.000 ou 15.000 euros por cisterna», explican los ganaderos.
En la reunión se habló también de los servicios que perfila la Xunta de matadero móvil y oficina agraria móvil o de la futura ley de recuperación y puesta en valor de la tierra agraria de Galicia, que reforzará el Banco de Terras y creará un Banco de Explotacións para propiciar el relevo en la actividad.