La magia del cine o Chano Piñeiro

DEZA

Santi M. Amil

El centro cultural Marcos Valcárcel de Ourense acoge una muestra en torno al primer largometraje del director forcaricense

22 sep 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El recuerdo de Chano Piñeiro sigue vivo, muy vivo. Y las tres décadas de su primer largometraje, Sempre Xonxa, sirven de excusa perfecta para poner en valor una vez más a este pionero del cine gallego. Desde esta semana se puede ver en el centro cultural Manuel Valcárcel de Ourense una exposición, Filmado en Ourense. Chano Piñeiro. 1989-2019 que organiza el festival OUFF para celebrar esos treinta años del filme del director de Forcarei.

La inauguración tenía lugar el pasado martes y fueron muchos los que acudieron al acto. Una exposición que recuerda vívidamente todo lo que supuso Sempre Xonxa para el cine gallego. Cuenta con el apoyo de un sinfín de materiales, desde prendas utilizadas por el elenco de actores hasta la curiosa bicicleta con alas, ahora oxidada aunque intacta, además de fotografías y cartelería en torno a la película, un hito en la cinematografía gallega. Tampoco faltan referencias al resto de producciones de Chano Piñeiro, como Os paxaros morren no aire, de 1977; Eu, o tolo (1978); Mamasunción (1984); Esperanza (1986); y O Camiño das Estrelas (1993). Una filmografía breve pero que otorgaron al guionista, productor y director de Forcarei un reconocimiento unánime.

Como apunta uno de sus biógrafos, el también forcaricense Francisco Rozados, «o seu mérito radica en sentar as bases para infraestrutura do cine galego e, sobre todo, en dar unha tremenda confianza a un sector que estaba nos seus inicios. Pero o máis importante é que nos ensinou a soñar coa posibilidade dun cine galego e en galego».

Otros filmes

Junto a Sempre Xonxa y el resto de creaciones de Chano Piñeiro, también se recoge en la muestra, que se podrá visitar en Ourense hasta el 27 de octubre, material de otros filmes estrenados en aquel 1989: Continental y Urxa. Las tres películas se estrenaron en noviembre de aquel año en Vigo, embrión de la actual pujanza de la cinematografía y el audiovisual gallego.

En la inauguración de la muestra el pasado martes la emoción palpitaba en el ambiente, con la presencia de la viuda de Chano Piñeiro, Mariluz Montes, o de la actriz Uxía Blanco, que participaba en uno de sus primeros trabajos como protagonista en Sempre Xonxa. Y todo ello con el recuerdo de una frase ya mítica del director forcaricense: «Facer cine en Galicia é posible, facer cine en galego é obrigatorio».