El Lalinense comienza con triunfo pero con buen juego solo a rachas

Javier Benito
javier benito LALÍN / LA VOZ

DEZA

miguel souto

Los rojinegros se impusieron por 27-24 al Seis do Nadal en el Arena

21 sep 2019 . Actualizado a las 21:42 h.

Los comienzos son difíciles. Lo puede certificar el Lalinense, superior en teoría al Seis do Nadal. Pudo pesar la presión externa que les sitúa como aspirante a la fase de ascenso. O los nervios del primer partido de liga. O jugar en pleno fragor de las fiestas de As Dores. O la necesidad de pulir detalles en los sistemas. Podríamos seguir pero lo más positivo radica en comenzar con dos puntos en el bolsillo, con un 27-24 final. Fortificar el Arena figura entre las máximas de Pablo Cacheda, quien sigue acumulando victorias desde que recaló en el banquillo rojinegro.

Desde las primeras escaramuzas el Lalinense estuvo por delante. Pachi tuvo el honor de firmar el primer gol de la liga 2019-2020. Aplicarse en defensa para lograr rápidas transiciones y situaciones propicias ante la portería rival. Pero el Seis do Nadal jugaba sin complejos, dispuestos a amargarles el debut en casa. Igualada a dos goles, a tres,... a los rojinegros les costaba coger ventaja. La primera significativa fue un 7-4. Pero la igualdad se convertía en norma, con juego solo a rachas, encadenando aciertos y errores, especialmente en ataque. Los visitantes igualaba a diez y a once, aunque nunca estuvieron por delante. Dos goles finales llevaron al 13-11 para los locales al descanso.

Las pérdidas de balón habían lastrado al equipo, con nueve solo en el primer período. También los fallos en lanzamientos, entre paradas del portero rival y más de un poste, con veintiún fallos durante los sesenta minutos. La segunda mitad también comenzó a tirones, sin conseguir una ventaja significativa en el marcador, como mucho de tres goles. A los doce minutos pedía tiempo muerto el entrenador del Seis do Nadal. Pero no les surtió efecto, con agresividad defensiva rojinegra que les permitió subir la diferencia a cinco.

Cuando parecía que podía romperse el partido los visitantes lograban dos tantos y Roberto Álvarez se retorcía sobre la cancha, tras un golpe en un hombro. Minutos de parón, hielo en la zona afectada y retirada entre aplausos. Las ventajas seguían fluctuando entre tres y cuatro goles. Con el 24-21 era Pablo Cacheda, a falta de seis minutos, quien solicitaba tiempo muerto para reorganizar sus filas. Pero siguió una racha de errores en ataque que acercó a los visitantes. Incluso con 24-23 tuvieron opción de igualada. El público notó ese momento de dudas. Los gritos de ánimos desde la grada parecieron surtir efecto y se estiraba de nuevo la diferencia a un 26-23 tras gol de Ramón.

A menos de un minuto nuevo tiempo muerto del rival para preparar un última jugada en ataque, sabedores de que no había tiempo para más con 27-24. Hubo buena defensa y el balón salía por banda en un intento de Jorge por salvarlo. Lo retuvo en exceso según los árbitros, que le descalificaron con roja al producirse a menos de treinta segundos para el final. Fue el broche agrio a un partido de altibajos, con un Lalinense por pulir.

?Durán, Ramón (6), Losón, Tate (5), Román (3), Roberto Álvarez y José (2) -equipo inicial-, Ivi, Adrián (1), Bruno, Jorge (5), Porto (3), Manuel, Pachi (2), Aser y Rubas

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Bretal, Leirós (2), Santomé (5), Diego (3), Guille (7), Abraham (1), Gayo -equipo inicial-, Silva, Salgueiro, Quique (1), Diego, Rivas, Treinta (3), Pedro (1) y Mera (1)

Tanteador cada 5 minutos: 4-2, 6-4, 9-6, 10-9, 12-19, 13-11 (descanso); 15-13, 16-14, 20-16, 23-19, 24-21 y 27-24 (final).

Árbitros: Pablo Álvarez y Julio Villanueva, de Galicia. Expulsaron a Jorge por roja directa y excluyeron una vez a Tate, Bruno y Aser por el Lalinense.

Incidencias: 300 aficionados.