Un cocido redondo que recorre el mundo

Rocío Perez Ramos
Rocío Ramos LALÍN / LA VOZ

DEZA

miguel souto

Los emigrantes o descendientes de gallegos copan las mayores compras del emblemático plato en lata

01 ago 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Galicia tiene mil y un sabores y uno de ellos es el cocido. Un plato que forma parte de nuestra vida y que dice mucho de nuestro carácter. Conocerlo, como a nosotros, requiere tiempo, horas a fuego lento y mucho mimo. Un sabor y un olor que nos toca la fibra y que lleva aparejado también ese aire de fiesta asociado a bandejas repletas y reuniones familiares o con amigos. Encerrar en una lata todo lo que un cocido conlleva y supone, no era tarea fácil.

Si en algún sitio presumen de entender de cocido, ese es Lalín. De ahí que fuese una empresa de estas tierras en el corazón de Galicia el que consiguiera el milagro. Embutidos Lalinense comercializa el cocido en lata desde hace unos años. Una iniciativa que tuvo un antecedente también exitoso: las latas de lacón con grelos que salieron al mercado en agosto del 2011.

Llegar hasta ahí no fue tarea fácil. Cruz López, responsable de comunicación de esta firma familiar, explica que el proyecto de crear una conserva a partir de un plato que les representase se acabó de gestar en el Fórum Gastronómico de Santiago de Compostela en febrero del 2010. Allí, apunta, «gracias á confluencia de ideas e boa sinerxia co director dunha empresa conserveira» fueron dando forma a una idea a la que Embutidos Lalinense tenía en mente hacía años pero que era un proyecto que fueron posponiendo al no disponer de los medios técnicos necesarios.

El proceso, indica Cruz López, «requeriu moito esforzo, pero ao tempo foi moi ilusionante». Lo que tenían claro era que el producto que presentaran «tiña que responder aos nosos parámetros de esixencia. Utilizar ingredientes de primeirísima calidade na súa elaboración, non utilizar aditivos, é que o resultado final de cocción e de sabor convencese aos consumidores». Para ello apostaron primero por el lacón con grelos, uno de los platos más típicos de Galicia.

Lo que se buscaba era un sabor perfecto y auténtico. «Durante máis de un ano -cuenta Cruz López- realizáronse as distintas probas de cocción de todos os ingredientes: lacón, chourizo, garabanzo, pataca, grelo... xa que cada un deles presentaba unha dificultade de cocción». Se buscaba «que a pataca non se desfixese, que o lacón e o chourizo tivesen a consistencia adecuada, que o garabanzo estivese ao dente e que o grelo non deixase un retrogusto amargo que a tantos consumidores lles desagrada». Cada prueba que la empresa lalinense realizaba la llevaba a diferentes restaurantes especializados en cocidos para que fuesen corrigiendo sabores y texturas e ir perfeccionando el resultado. Finalmente, «despois de 16 meses e de probar unhas 100 latas de lacón con grelos, finalmente saliu ao mercado en agosto do 2011», afirma. El producto se presentó en el Salón Gourmet de Madrid, Alimentaria en Barcelona y en el Fórum Gastronómico de Santiago, donde recibió el Premio Innovación 2012 y al año siguiente, en el 2013, conseguía la Medalla Dagda de los Premios de Gastronomía de Galicia.

Teniendo su sede en Lalín, donde el plato rey es el cocido, el paso siguiente era obvio. La lata además de lacón, grelos, patata, garbanzos y chorizo suma a estos ingredientes oreja y panceta curada. En octubre del 2012 sacaron al mercado un nuevo formato más pequeño del lacón con grelos, con una ración individual de 400 gramos, atendiendo a los nuevos modelos de consumo.

Desde su salida al mercado, las conservas tuvieron muy buena acogida y con ellos, indica Cruz López, «conseguimos levar dous platos da gastronomía galega polo mundo enteiro». Lalín es uno de los puntos de venta importantes y desde aquí salen latas que se envían a familiares en diferentes partes del orbe que trabajan o estudian fuera y que pueden así curar, al menos vía estómago, un poco la morriña.

Para servir estos platos no hace falta más que calentar la lata al baño María o abrirla, vaciar su contenido y calentar. Una vez calentadas, el caldo permite también hacer una sopa. Las latas de cocido son de 1,8 kilos para dos o tres raciones y la grande de lacón de un kilo.

La empresa lalinense tiene su principal mercado en Galicia y cuenta con reparto propio a diario. En Lalín disponen de dos tiendas propias pero también venden on line y en menos de 48 horas sus productos llegan a cualquier punto de la Península.

Ahondando en la idea de ayudar a curar la morriña a los que están fuera, Embutidos Lalinense sumó a su carta un kit antimorriña que ya es la estrella de las ventas en la Red. La idea, apunta Cruz López, «naceu da experiencia propia de ter familiares que estaban fora e que botaban moito de menos a comida galega». Se creó «unha caixa que leva cocido, chourizo, salchichón e o que lle chamamos potaxe galego (lacón, chourizo e panceta), para que permitise facer un prato de culler en calquera parte do mundo». Las cajas se distribuyen sobre todo por España, pero también son enviadas con mucha frecuencia a Francia, Inglaterra, Suiza o Alemania.