Cuíña señala que la medida es «un escándalo maiúsculo na rúa» y Crespo dice que demostrará que es rentable por la inversión que llegará con la gestión del gobierno
29 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Largo pleno organización en Lalín, que acabó con los concejales del PP en solitario en el salón de plenos. Cuatro minutos antes, los diez ediles de la oposición abandonaron la sala: «Ímonos levantar para non votar o que consideramos que non se debe votar, ante o escándalo maiúsculo que hai na rúa» con esta cuestión, expresó Rafael Cuíña (CxL). Fue el colofón a una sesión en la que Crespo se tuvo que fajar a fondo con la oposición para justificar los salarios de su equipo. Porque para el suyo ?47.200 euros brutos anuales? apenas hubo críticas: no en vano calcó el de Rafael Cuíña del anterior mandato, a quien dejó caer en la sesión que cobró pese a haber anunciado que no lo haría. Más ataques tuvo el salario de Paz Pérez ?46.200 euros?, porque Crespo en su día había criticado que el anterior teniente de alcalde cobrase la misma cantidad. Eran, no obstante, dos dedicaciones sin mucho margen de maniobra para una oposición que el pasado mandato las aprobó idénticas para su gobierno.
Así que el fuego real llegó con los otros tres concejales y cuatro asesores. Vilariño (BNG) cuestionó las cifras de los sueldos pero no el número de dedicaciones, porque admite que el gobierno tiene que tener medios para trabajar: «Son salarios insultantes á intelixencia dos veciños de Lalín e á realidade económica que aquí hai». Recordó que los salarios del gobierno suben un 65 % y un 250 % los asesores, calculando que el staff de Crespo cobrará en el mandato más de 1,7 millones, incluyendo Seguridad Social. Cuestionó los 27.227 de dedicación parcial de Cuñarro, y los 37.227 de Begoña Blanco y César Reboredo ?«en Deportes fichamos a Michael Jordan», dijo? apuntando un pago de favores por ir en la lista electoral: «Estas cousas fan á xente aborrecer a política», sentenció.
Román Santalla (PSOE) dijo que la propuesta conmocionó Lalín: «A xente non fala doutra cousa», con críticas incluso de votantes del PP «estupefactos de como usan fondos públicos en pagar salarios e favores a todo Dios». Dijo que comparado con este, el anterior gobierno era una ONG y acusó a Crespo de engañar al electorado: «Gañou as eleccións raspadiño. Se asoma a cabeza con este tema non o iban votar».
Teresa Varela (CxL) criticó que la de Cuñarro figure como dedicación parcial, cuando está 700 euros por encima de la total que recibió el pasado mandato Miguel Medela. Y cuestionó ?al igual que el BNG? que tenga dos asesores ?Antonio Rodríguez con 34.800 euros y José Iglesias con 28.000?. Considera todos estos salarios «unha falta de respecto aos lalinenses. Paréceme ben cobrar, pero esto non é dignificar a política», que dijo se hace eliminando tramas y corrupciones. Cree que Antonio Rodríguez merece la dedicación, pero acusó a Crespo de hacer una falsa renovación de lista, cuando ahora «o mete pola porta de atrás, non sei se lles gustará aos seus votantes». En la sesión no se cuestionaron los 34.800 euros de Manuel Vilariño en prensa, cifra que también cobrará Inma Vilariño.
Crespo justificó los salarios por el trabajo que desarrollarán todos, y los recursos de otras administraciones que llegarán a Lalín por su gestión. Será entonces, dijo, cuando se pueda valorar si este gobierno sale más caro o más barato que el anterior. Hizo dos correcciones en el pleno: para situar a Antonio Rodríguez como asesor de Obras, y José Iglesias del Rural; y para aumentar las horas de la dedicación parcial de Cuñarro de 20 a 30 semanales, aunque está seguro de que superará las 40. Acusó de demagogia a la oposición por sumar las cuotas de Seguridad Social a los sueldos; recordó que en su día tuvo ya en el gobierno cinco dedicaciones y tres asesores, negando a Santalla haber mentido: «Eu xa dixera que de 2011 a 2015 tiven só dúas adicacións, e que foi un erro».
Comparativas de Crespo
Tiró de comparativa para señalar que «aquí cerca, con outro partido» los salarios de políticos se llevan el 1,7 % del presupuesto municipal y en Lalín es el 1,3 %. Y apuntó que en Lugo todos los ediles del bipartito PSOE-BNG tendrán dedicación exclusiva ?ofrecieron dos al PP?. Cristóbal Fernández ?que vaticinó que Paz Pérez cobrará más que el alcalde por sus trienios, a los que le invitó a renunciar? le recordó que A Estrada gastará menos, y Crespo dijo que el alcalde cobrará más.
Añadió Crespo que son dedicaciones necesarias por la situación caótica del Concello, y puso ejemplos: «De 424.000 euros en formación en emprego para xóvenes ata 29 anos, só se poden xustificar 31.000. Pérdense 393.312: eu non quero que me pase esto». Ni que desde hace más de un año no fiche ningún funcionario porque la aplicación no funciona. La sustituirá en próximos días, aunque el interventor repare esa actuación. Los dedicaciones se aprobaron con 11 votos del gobierno y abstención de la oposición por estar ausente.
Pulsos y pullas en el primer día
Sesión inaugural con un Vilariño muy incisivo, Varela dura y Cuíña institucional; varias pullas entre Crespo y Santalla. El socialista le espetó que en Lalín se dijo cuando envió a Paz Pérez a Pontevedra fue por librarse de quien le podía hacer sombra. Crespo replicó: «Eu cando non quero que alguén me faga sombra, fágoo conselleiro». Y duelo por quién se lo jugó todo por Lalín: Crespo recriminó a Santalla que dejó un pie en Madrid y otro en la cooperativa, y este le contestó que no fue senador porque no le dejaron.
Santalla lanzó un primer pulso al gobierno municipal, y lo ganó: con Crespo ausente, se negó a intervenir hasta su regreso, justificándolo además como muestra de respeto al alcalde. Paz Pérez, en aras de la cordialidad, aceptó y Cuíña propuso un receso. Duró dos minutos, el tiempo justo de que Crespo fuese avisado de lo que pasaba, y con gesto adusto ordenase reanudar la sesión. Y ya sabe que del pleno, mejor salir poco.
La sesión vació de contenidos el pleno en la junta de gobierno, «por operatividade»: la oposición afeó al PP que quisiese bloquear al anterior gobierno, cuando tan pronto pudieron hacer el trasvase inverso con Cruz lo llevaron a cabo, sin importar el interés vecinal.
El alcalde encarga un informe jurídico en desacuerdo con el reparto en Terras de Deza
Al dar cuenta de las designaciones para la Mancomunidade Terras de Deza, Crespo anunció su desacuerdo con el reparto establecido por el escrito y anunció que pedirá un informe jurídico: «Cóstame crer que en Lalín sexan 3 para PP, 2 para CxL, 2 para PSOE e 1 BNG» cuando los populares lograron mayoría absoluta. Y si el reparto es correcto, propondrá cambiar los estatutos de la mancomunidad. La oposición criticó esa postura, apuntando que la preocupación del reparto es porque el PP pierde la mayoría absoluta en el organismo, al tiempo que indicaban que el PP en el Concello tiene mayoría absoluta de ediles, que no de votos.
En la designación de representantes en distintos órganos, votos a favor de PP y PSOE, abstención de CxL y en contra BNG. Se cambió a Avelino Souto como suplente en el GDR por Raquel Lorenzo, tras decir Varela que su familia recibió subvenciones de la entidad: Crespo le recordó que no hay ningún problema por ello.
Patronato Cultural
El alcalde apuntó que quiere acabar con el Patronato Cultural para conformar la nueva Axencia de Cultura, Deportes e Turismo este año si es posible, o si no en 2020 como máximo. Arreciaron las críticas por los cobros y por las personas elegidas del mundo de la cultura ?«Gómez só volve cando hai remuneración», llegó a decir Vilariño?. La oposición votó en contra de este punto.
En cuanto a las comisiones informativas, se aceptó la demanda de CxL de un representante más: quedan con 7 de PP, 3 de CxL, 2 PSOE y 1 BNG. Votaron a favor PP y CxL, con abstención de PSOE y BNG.
Del Concello como agencia de colocación a la promesa de enseñar la nómina
El debate de los salarios fue transversal, y sobrevoló cada punto del pleno. Román Santalla apuntó que el PP convierte el Concello «nunha axencia de colocación de altos directivos»; Vilariño acusó a los populares de pensar que la institución es lo mismo que el partido, y utilizarla.
Crespo negó las acusaciones, se comprometió a hacer pública su nómina y afeó a la oposición la crítica exacerbada hacia los salarios establecidos: «Pero se en privado me recoñecían que o soldo de Medela era unha vergoña, e pagar a un asesor 16.000 euros anuais era ridículo». Dijo que si el cuatripartito hubiese repetido, tendrían 5 dedicaciones: Cuíña, Santalla y Medela, más Vilariño y Lara Rodríguez. Y cuatro asesores, uno por partido.