19 may 2019 . Actualizado a las 05:00 h.
La última cuesta, a menos de un kilómetro de la meta, le costó a Cristóbal Dios bajarse ayer del podio del Triatlón de Pamplona en el que se había impuesto el pasado año. Fue cuarto, o como él mismo comentaba al término de la prueba, «el tercero de los mortales» porque el vencedor fue Eneko Llanos. Dios se mostró satisfecho de su rendimiento, no en vano rebajó en cinco minutos su marca del pasado año, lo que da idea del ritmo al que se corrió. El estradense pagó en la carrera a pie el esfuerzo en la bicicleta para alcanzar al que finalmente fue tercero, Joan Rubireta.