«Para saber qué compramos hay que darle la vuelta al producto»

Rocío García Martínez
rocío garcía A ESTRADA / LA VOZ

DEZA

cedida

La experta enseñará en el Novo Mercado cómo mirar la etiqueta de un alimento para saber qué es realmente

10 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La estradense Paula Mariño Lorenzo es graduada en Nutrición y Dietética por la USC, tiene un máster de especialización en Alimentación, Nutrición y Metabolismo por la Universidad de Navarra y en la actualidad está haciendo el doctorado en Endocrinología y Nutrición. Conoce bien las estrategias de las multinacionales para intentar colar como sanos productos que no lo son. Este sábado a partir de las 12.00 horas compartirá algunos trucos con los consumidores en el Taller de Etiquetado Nutricional que se celebrará en el Novo Mercado, en el marco de la segunda Feira Ecolóxica e Local.

-¿Cuál es el truco para saber qué estamos comprando?

-Darle la vuelta al producto. Las marcas, con el tema del márketing, siempre intentan, dentro de lo legal, hacer el producto más atractivo. Muchas veces parece algo que no es y para un usuario normal se hace complejo distinguir. Lo más práctico es no mirar la cara principal del producto, sino darle la vuelta y leer la lista de ingredientes.

-A veces la lista de ingredientes tampoco es fácil de interpretar.

-Hay que saber, y mucha gente lo desconoce, que los ingredientes siempre aparecen de mayor a menor cantidad, así que de un vistazo ya se puede saber al menos si tiene mucho o poco azúcar o si puede ser o no un producto saludable, sin necesidad de ir a la tabla nutricional, que puede ser más lioso.

-Los médicos recomiendan evitar los azúcares y las grasas, ¿le parece fácil una compra así?

-Los azúcares están en casi todos los procesados, aunque se pueden llamar de mil maneras: jarabes de, siropes de, dextrosa, fructosa, maltodextrina... Todo eso son azúcares. Con las grasas la gente ahora está bastante concienciada. Las hidrogenadas, las parcialmente hidrogenadas y las grasas de palma, cuanto más lejos, mejor. Incluso los aceites, salvo los de oliva de virgen extra, todos los demás, de oliva o de girasol, van a ser refinados.

-¿Qué hay detrás de lo light, 0% o bajo en grasa?

-Hay reglamentos que estipulan qué productos pueden llevar cada una de esas etiquetas, pero el usuario de a pie no tiene por qué saberlo. Por ejemplo, que un producto sea bajo en grasa solo quiere decir que tiene al menos un 30 % menos de grasa que otro homólogo. Pero no quiere decir que sea poca. Además, puede tener menos grasa pero muchos azúcares. O al revés, un producto sin azúcar añadido puede tener grasa de peor calidad. Lo mejor es evitar estos productos procesados y optar por los frescos y naturales y, cuando se consuman procesados, elegir el normal, el de toda la vida. Es mejor un yogur natural entero que un yogur light. Los light suelen tener más aditivos para hacerlos más atractivos.