Manuel Carbón Castro: «Que el público me vote, que se va a identificar conmigo y a pasarlo bien»

Rocío García Martínez
rocío garcía A ESTRADA / LA VOZ

DEZA

cedida

El estradense cuenta que la convivencia de 100 personas durante dos días en la casa de Guadalix «fue una locura»

21 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Tras pasar dos días y medio conviviendo con un centenar de concursantes en la casa de Gran Hermano, el estradense Manuel Carbón Castro ha tenido que abandonar el mediático hogar. No ha logrado colarse entre los 18 concursantes seleccionados de forma directa por el programa para quedarse en Guadalix de la Sierra. No obstante, su participación en el reality show todavía es posible si el joven mago consigue ser uno de los dos candidatos más votados por el público a través de la web del programa.

-¿Qué le diría a la gente para que le vote?

-Que confíen en mí. No voy a salir con eso de que digo las cosas a la cara o soy muy especial. Soy una persona con la que el público se puede identificar y se lo va a pasar bien.

-¿Qué haría con el premio?

-Lo que busco es una estabilidad económica para intentar dedicarme profesionalmente a la magia. Yo estudié Magisterio de Educación Primaria y los niños y la docencia también me gustan, pero la magia más.

-¿Cómo empezó la aventura de «Gran Hermano»?

-De casualidad. Yo me presenté, como mago a otro casting de Telecinco, del programa Got Talent. Les llamé la atención, pero me dijeron que mi perfil encajaba más en Gran Hermano y me recomendaron ese casting. Fui hace dos semanas.

-¿Esperaba ser seleccionado?

-Sí. Yo soy una persona bastante positiva y la verdad es que sí lo esperaba. Los que fliparon fueron mi familia y mis amigos cuando lo supieron...

-¿Sospechaba que iba a compartir casa con 99 personas?

-Eso no, pero algo distinto a lo de siempre sí me imaginaba por los comentarios que me hicieron. Te decían que tenías que ir preparado tanto para estar dos días como varios meses y cosas así...

-¿Qué llevaba en la famosa maleta de 20 kilos con la que pueden entrar al programa?

-Nada especial. Varios trajes porque siempre voy en traje, un pijama, una toalla por si acaso y poco más. Hay muchos objetos que no puedes llevar. Nada de marcas, ni reloj para que no sepas en qué hora vives...

-¿Cómo fue esa convivencia de dos días y medio?

-Entramos de forma escalonada. Yo entré el domingo sobre las 17.30 horas y salí el martes al acabar la gala, a las 1.30 de la madrugada. La estancia en la casa con 100 personas fue una locura. Solo había un baño, una ducha, una cocina y diez camas. Nos pasamos el día haciendo colas para todo.

-¿Llegó a conocer a alguno de los concursantes que están dentro?

-Hablé mucho con Nerea, la del chihuahua. Cuando le preguntaron quién le hubiese gustado que entrase me eligió a mí.

-¿A alguno le ve madera de ganador de esta edición?

-Veo mucho personaje clásico y muy repetitivo que creo que la audiencia aborrece. Como Yolanda, por ejemplo. Pero ganador no sabría decir.

-Visto desde dentro, ¿hay tanto friki como parece?

-Hay mucha gente que intenta llamar la atención todo el rato. Yo intenté ser como soy.

-¿Se puso nervioso la noche de la selección?

-Yo no soy de ponerme nervioso ni voy a deprimirme si al final no entro.

-La noche del jueves se decide todo, ¿qué va a hacer hasta entonces?

-La verdad esperaba que nos tuviesen incomunicados, pero como no fue así, pues dar una vuelta por Madrid. Estamos todos en un hotel en las afueras, pero allí están todos hablando del programa todo el rato y haciendo conjeturas. A mí después de estar con cien personas en la casa me apetece estar solo, desconectar. Y que sea lo que tenga que ser.

-Y si al final no entra, ¿se acabó la magia?

-No. Estoy enganchado. Desde pequeño -lo típico, con la caja de Magia Borrás- supe que quería ser mago. Después lo dejé porque requería leer y practicar mucho y de niño lo que quieres es jugar. En primero de carrera lo retomé en serio y todos los días le dedico al menos una hora. La cartomancia es mi especialidad, pero también me gusta la magia de cerca y el mentalismo. Supongo que prepararé oposiciones a Magisterio. Me gustaría ser profesor para tener el sueldo asegurado y poder arriesgar como mago.