Magaly Barreiro lleva hoy el frío del Ártico hasta O Foxo

Francisco Brea
fran brea A ESTRADA / LA VOZ

DEZA

CEDIDA

Entre los múltiples viajes de la docente y aventurera estradense también se encuentra la Antártida

11 dic 2014 . Actualizado a las 05:14 h.

El colegio de O Foxo recibirá hoy a las 12.00 horas la visita de la profesora de biología y geología del IES Manuel García Barros Magaly Barreiro Ponte, quien hablará con los alumnos de su viaje al Ártico.

Magaly es una profesora aventurera, que ya ha recorrido diferentes lugares del mundo poco conocidos para el turista habitual. En la charla que ofrecerá hoy en O Foxo hablará sobre su viaje en agosto de 2013 a las Islas Svalbard, un archipiélago ubicado a unos 1.000 kilómetros del Ártico que pertenece a Noruega, «les hablaré sobre la fauna, la cultura, la forma de viajar o también intentaré concienciarlos sobre el cambio climático y tengo pensado vestir a una alumna con toda la ropa que suelo usar en mis viajes, que es mucha. Para mi es un honor que me inviten a dar una conferencia en un centro como este» declara. Magaly tuvo la oportunidad de estar 12 días en este lugar acompañada de más profesores pertenecientes a la Asociación Española para la Enseñanza de las Ciencias de la Tierra (Aepect), «allí todo es muy curioso, hay algún pueblo pero con pocos habitantes. Nosotros acampamos siempre acompañados por personas armadas con rifles, ya que es muy importante la seguridad por la presencia de osos. De hecho pudimos ver a una osa con dos crías» comenta. Agosto es uno de los meses donde en aquella zona del mundo las 24 horas son de día, algo que para Magaly no fue un problema, «vale la pena no dormir y poder disfrutar cada momento, además soy una gran aficionada a la fotografía y hay muchas cosas que fotografiar».

Pero esta profesora del IES Manuel García Barros ha visto mucho más mundo. En 2004 viajó a otro de los lugares fríos de la Tierra como es la Antártida, un viaje que tuvo que hacer desde la ciudad argentina de Ushuaia en barco, «es una travesía en barco de dos días, en el que llegas a un punto en el que de repente empieza a hacer mucho frío y comienzas a ver icebergs. Cuando puedes ver a los pingüinos o a las focas a pocos metros de ti en su hábitat sientes una gran emoción» asegura y añade que «es diferente hasta la estancia, ya que tienes que dormir en el barco y siempre que bajas de él y vuelves a subir hay que, por ejemplo, limpiarse las botas. Tienen todo muy controlado».

Aunque parezca que le gusta el frío, sus excursiones también le han llevado a la selva africana, donde pudo convivir varias horas con tribus tan exóticas como la masái o los bushman.