El Ceip de Silleda castiga a 12 niños sin un plato y, tras las quejas, dirección y padres varían la regla

lalín / lA voz

DEZA

El centro cambia el reglamento de régimen interno tras la queja de varios padres

27 feb 2014 . Actualizado a las 15:09 h.

El Ceip de Silleda aplicó ayer a 12 niños de tercero y cuarto una sanción en el comedor consistente en dejarlos sin segundo plato. Al menos dos padres (los niños fueron avisados del castigo el día anterior) acudieron al centro para quejarse a la dirección. A mismo tiempo avisaron al Concello cuya edil de Educación, Pilar Peón, acudió también y trasladó a la dirección que no le parecía bien el tipo de sanción, pero tampoco podía hacer nada porque la directora le explicó que la sanción estaba recogida en el reglamento de régimen interno del centro. El alcalde consideró ayer que no tenía competencias el Concello y si las quejas superaban a la dirección deberían ir a Educación.

Pero no fue el caso. La directora, Silvia Peña, ya pactó con los padres el cambio del reglamento y ya entró por registro para que lo respalde el Consello Escolar tras carnavales. Se cambia por quedarse períodos de recreo copiando el apartado del reglamento incumplido.

La directora señaló que «se impuso un castigo que está recogido en el reglamento», y este lo respalda el Consello Escolar donde están padres, profesores y Concello. A los padres no les gustó y a petición suya «se redactan nuevas sanciones» para poder actuar sobre conductas concretas. El reglamento no es cosa de dirección sino de todo el colectivo escolar. Además tiene continuidad en el centro y se le van añadiendo adendas según surgen necesidades, dice la directora que recuerda que hace unos años no había nada sobre uso de móviles porque no había.

«Ningún niño se fue sin comer»

El hecho «es reiterativo» y consistió en que los niños tiran la comida, se burlan de los cuidadores y esa conducta es contagiosa en los niños, se imitan.

Acogiéndose al reglamento dejaron a los niños sin el segundo plato. Pero la directora insiste en «que nadie piense que se fueron sin comer para casa, comieron el primero y muchos repitieron varias veces y era el de proteínas porque llevaba trozos grandes de carne, el retirado fue el de hidratos, patatas con pollo, que es el que les gusta más, como decían los padres. La opción para corregir la actitud de lo niños era retirar el plato o plantear la expulsión, señala la directora, según el reglamento.

Pero con las quejas de los padres «que son comprensibles, piden el cambio y no hay problema se cambia que esto es una comunidad educativa donde tienen que participar todos», dice la directora.