El Rali do Cocido tuvo ayer su presentación oficial. Fue en el consistorio lalinense y con los coches de Álvaro Méndez y Guitián a la puerta. Quedan dos días y medio para que el Campeonato Galego de Ralis eche a andar, por lo que la organización, a cargo de la Escudería Lalín-Deza, quería dar los últimos detalles de la primera competición de motor del año.
Con los seis tramos que componen el rali ya desgranados, ayer se habló de cifras. La crisis no es ajena al mundo del motor, por lo que Antonio Rodríguez Troitiño explicó que se ha recortado 10.000 euros de presupuesto respecto al año pasado, y la cifra que se maneja es de 70.000. «A día de hoxe temos un déficit de 10.000 euros», reconocía el presidente de la escudería, que añadió que «a entrada ao tramo urbano costará tres euros, é unha das vías que manexamos para salvar o orzamento». Si no funciona, parece que habría que echar mano de la limitada hucha de la escudería, puesto que el presupuesto no se puede adelgazar más. «O seguro do rali xa se leva sobre 33.000 euros», explicaron.
Los números que rodean al Rali do Cocido, que alcanza su mayoría de edad, siempre son grandiosos, al fin y al cabo, «somos unha proba consolidada, estamos entre as dúas mellores de todo o Galego, e soamos a nivel internacional», presume el mandatario de Lalín-Deza. Para que el viernes por la noche y durante toda la jornada del sábado todo salga rodado, alrededor de 250 personas trabajarán en organización y seguridad. Unas 60 personas de la escuedería Berberecho se desplazarán a la comarca junto con un equipo de radioaficionados y un amplio dispositivo de agentes de Tráfico, Guardia Civil y del Grupo Rural de Seguridad de la Benemérita.
Sin plazas hoteleras
El Rali do Cocido atraerá a Lalín a varios miles de aficionados al mundo del motor, pero también a cientos de personas que forman los equipos participantes, que incluyen a pilotos y asistencias, además de a toda la gente de la organización que llega de fuera. Según detalló ayer Rodríguez Troitiño, las plazas hoteleras en los establecimientos de la zona están cubiertas y están encontrando serias dificultades para ubicar de viernes a sábado a gente. «Imos ter que recurrir a algunhas casas rurais», apuntaba el presidente de Lalín-Deza, que reprochó, sin embargo, que algunos establecimientos, tanto hoteleros como de hostelería, no hayan colaborado con el Rali, a pesar de que el evento del motor atraerá a un gran número de visitantes los próximos días. El argumento de atracción de visitantes también fue subrayado por el edil de Deportes, José Domínguez.