Riazor pasa con solvencia el corte, Balaídos se agarra a sus opciones  y Galicia sueña con dos sedes para el Mundial 2030

Iván Antelo REDACCIÓN

DEPORTES

CESAR QUIAN

España trata de convencer a Marruecos, Portugal y a la FIFA para incluir también a Vigo y a Valencia y ampliar a trece su relación de estadios

29 jun 2024 . Actualizado a las 12:28 h.

La ciudad marroquí de Agadir escenificó este viernes lo que será la candidatura del Mundial 2030, formada por España, Portugal y Marruecos. Los tres países se reunieron desde primera hora de la mañana para trasladarle a la FIFA cuál es su hoja de ruta: 22 sedes, de las que 13 las aportaría España, 6 Marruecos y 3 Portugal.

No hubo grandes sorpresas, más allá del intento de elevar a 13 las propuestas nacionales y de esperar hasta ultimísima hora por ver si Vigo y Valencia podían sumarse a la carrera.

¿Cuáles son esas 13 aspirantes españolas y qué posibilidades tienen?

La candidatura española presentará ante la FIFA 13 estadios como posibles sedes para el Mundial 2030 para que sea esta la que decida si van todas o alguna debe quedarse por el camino. Hay optimismo con que el organismo internacional apruebe sin muchos problemas al Santiago Bernabéu y al Metropolitano, en Madrid; el Camp Nou, en Barcelona; San Mamés, en Bilbao; la Romareda, en Zaragoza; y la nueva Cartuja, que será totalmente remodelada, en Sevilla. Además, tanto el estadio de Gran Canaria como el de Riazor cumplen los requisitos de la RFEF sin problemas; al igual que Cornellà-El Prat, pero en el caso de las dos primeras les favorece el hecho de un mayor reparto geográfico y su proximidad con Portugal y Marruecos, respectivamente. En cambio, mientras en Madrid podría verse con normalidad que haya dos sedes, por ser la capital y el centro de España; en la RFEF preocupa que la FIFA pueda pensar que en Barcelona ya está el Camp Nou y, en el caso de que quiera recortar las sedes propuestas, el feudo del Espanyol pueda ser el descartado por esa duplicidad. Además, también cruzará los dedos para que la FIFA dé el visto bueno a Anoeta y a la Rosaleda. El problema de San Sebastián es el logístico, ya que cuenta con un aeropuerto muy pequeño; mientras que con Málaga preocupa que no cuele su faraónico proyecto de construcción por valor de 260 millones. En cuanto a Vigo, consiguió colarse a última hora; al igual que Valencia, que hasta ayer negaba a firmar la documentación requerida, pero el club accedió a través de un escrito enviado este mismo viernes.

Más encarrilado parece el asunto de Portugal, que propone dos estadios en Lisboa (el del Benfica y el del Sporting) y el del Oporto; y en Marruecos. Los africanos quieren exhibir músculo con una inversión de 1.30 millones en Casablanca (nuevo estadio de 113.000 espectadores), en Tánger, en Rabat, en Agadir, en Marraquech y en Fez.

¿Cuáles son los descartes y por qué?

De las 15 iniciales, ya es seguro que dos no estarán en la pelea. El proyecto del Molinón, en Gijón, fue el primero en caerse al no firmar las instituciones (Ayuntamiento y Principado) los documentos requeridos por la FIFA. Murcia sí lo hizo, aunque con muchas dudas, pero sus problemas fueron de financiación y eso les has llevado a quedarse definitivamente fuera.

El proyecto olívico costaría 62 millones de euros y hay de plazo hasta el 31 de julio

Contra pronóstico, Galicia aspira a dos sedes.

¿Qué sucede con Vigo?

Desde el principio se trabajó con la idea de solo una sede para Galicia. El propio expresidente del CSD, Víctor Francos, lo dijo en La Voz en el mes de septiembre. Así que todo se centró en una lucha con A Coruña, que ganó Riazor por ser un proyecto más sostenible y por tener mejor argumentada la financiación.

Vigo no arrojó la toalla y el miércoles encontró la complicidad del CSD, que le trasladó a la RFEF que vería con buenos ojos que hubiera dos sedes gallegas por el carácter transfronterizo que tendría con Portugal. Incluso desde el Gobierno se comentó la posibilidad de trasladar más propuestas a la FIFA y se consultó con el máximo organismo, que ha dado un OK doblemente condicionado: que sean todos proyectos solventes y que Marruecos y Portugal no se opongan. Así que Vigo sigue en la batalla,.

¿Cómo es su proyecto?

Vigo presentó un plan por valor de 62 millones de euros, de los que 41 irían destinados a reformar por completo la Tribuna y 2,4 al resto del graderío. La Xunta asumiría el 50%, la Diputación el 35% y el Ayuntamiento el 15% restante.

¿Cuáles son los plazos?

La FIFA otorga ahora un plazo hasta el 31 de julio para recibir toda la documentación de las sedes y subsedes propuestas. Todas ellas irán dentro de un dossier, que analizará con detenimiento y podría proponer cambios. Aunque las decisiones deberían saberse antes, la aprobación definitiva de las sedes se producirá en un congreso extraordinario, a celebrar en diciembre.

Trece subsedes continúan también en la carrera

La Real Federación Gallega de Fútbol propuso catorce estadios como subsedes: A Malata (Ferrol), el Vero Boquete (Santiago), el Ángel Carro (Lugo), A Magdalena (Vilalba), la ciudad deportiva de Abegondo, Ponte dos Brozos (Arteixo), Vista Alegre (Ordes), A Senra (Ribadumia), Burgáns (Cambados), Baltar (Sanxenxo), Pasarón (Pontevedra), Pardellas (Ponteareas), Afouteza RC Celta (Mos) y O Couto (Ourense). De ellas, Arteixo prácticamente se autodescartó durante la visita federativa, puesto que indicaron que iban a quitar el césped natural (como ya ha hecho).

Ninguna de ellas va vinculada en exclusividad a A Coruña o a Vigo e incluso podrían funcionar de forma independiente. Todas aspiran a entrar en el dossier que la RFEF entregará a la FIFA para su revisión. No hay ninguna cantidad de subsedes prefijada. Precisamente lo que quiere el máximo organismo internacional es que haya cuantas más mejor, para poner así a disposición de las selecciones y que sean estas las que decidan las que consideran mejores en función de sus necesidades. Por tanto, habrá subsedes que pasen el último cribado de la FIFA que luego no sean anfitrionas.