Millones para Negreira y denuncias para la prensa

DEPORTES

José María Enríquez Negreira pitó partidos en Primera y Segunda División hasta 1992
José María Enríquez Negreira pitó partidos en Primera y Segunda División hasta 1992

24 mar 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

El Barcelona pasa al ataque. Ha decidido que ya está bien de recibir críticas todos los días y ha iniciado una ofensiva contra la prensa a través de una quincena de denuncias a periodistas y medios de comunicación. El club azulgrana continúa sin dar explicaciones sobre el pago de más de siete millones y medio de euros durante casi dos decenios al que era vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros, pero sí ha decidido iniciar una estrategia intimidatoria contra los periodistas. Al parecer, la entidad que preside Laporta ha denunciado ya a cinco informadores bajo la creencia de que han difamado al club y prevé denunciar a una decena más. Además, el Barcelona ha puesto en marcha una insólita campaña entre sus aficionados para que hagan de delatores de los redactores que, según su criterio, atenten contra el honor del club. Para ello pondrá a su disposición un correo para que envíen las informaciones que consideren que deben ser llevadas a la justicia.

La táctica empleada por Laporta no es más que otro paso en la miseria moral azulgrana, que lejos de explicar el porqué de los pagos, se refugia en un populismo cutre y en un matonismo inaceptable. Porque no se trata de que el Barcelona no pueda defenderse y denunciar a medios de comunicación y a sus trabajadores. Se trata de que se ha destapado uno de los mayores escándalos, si no el mayor, que han acompañado al fútbol español a lo largo de su historia. Nadie ha podido negar, y de hecho no se ha negado, que se produjeron los pagos a Enríquez Negreira. Solo con esto, con independencia de que se logre probar o no si se compraron árbitros, es suficiente. No se le pagan millones de euros al vicepresidente de los colegiados para que te pase unos papelitos.

El tiempo dirá si la verdad jurídica va de la mano con las sospechas que hoy existen, pero mientras tanto la verdad es la que es y la que va trascendiendo todos los días en los medios de comunicación. Laporta no silenciará las informaciones. Es bastante menos de lo que se cree.