Támara Echegoyen: «Mi única responsabilidad es abrir la puerta para las que vengan»

Iván Antelo REDACCIÓN

DEPORTES

Gauthier Lebec / GUYOT environnement - Team Europe

La única española de la vuelta al mundo por etapas se subirá al barco en Brasil

13 feb 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Lo suyo son los retos contra el tiempo. Y también gestionar frentes como nadie. Porque si alguien es capaz de lanzarse a una campaña olímpica, a la vez que se enrola en una vuelta al mundo por etapas en un barco desconocido, esa es Támara Echegoyen Domínguez (Ourense, 1984). La única española en participar en la edición 2023 de la The Ocean Race es el arma secreta del Guyot environnement - Team Europe, barco de la clase Imoca.

—Estaba centrada en la campaña olímpica y, de repente, le llega de nuevo la oportunidad para participar en la The Ocean Race. ¿Cómo le surgió el reto?

—Fue una oportunidad que me vino por mi amiga Annie Lush, que había sido adversaria nuestra en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, cuando ella estaba en el equipo de Gran Bretaña de match race. Desde entonces mantuvimos una buena relación, ella estaba enrolada en el proyecto del Team Europe, y me contó que estaban buscando a una persona y que había la posibilidad. Creía que yo tenía el perfil adecuado. Esa llamada se produjo el verano pasado y le respondí que veía inviable compaginarlo con el proyecto olímpico. Me explicó que era para un apoyo de equipo, que necesitaba a alguien para que ella descansara, así que sería sin perjudicar mi campaña. Después del Mundial volví a hablar con ellos y me dieron esta oportunidad. El foco principal siguen siendo los Juegos Olímpicos, pero esto me venía como anillo al dedo.

—Tuvo la opción ya de entrenarse con ellos. ¿Cómo fue la experiencia?

—Me habría gustado haber tenido más tiempo, porque a esta vuelta al mundo llegan todos los equipos muy apurados. Estuve siete días con ellos en Francia y luego hice el transporte de barco de Barcelona a Alicante para conocer de primera mano las diferencias que hay respecto al VO65 [el Mapfre con el que hizo la anterior The Ocean Race]. Las sensaciones fueron muy buenas. Fue positivo estar con ellos porque es un barco totalmente distinto. Lo más complicado va a ser navegar dentro de una cabina, porque la visión y el resto de sensaciones que empleamos se reducen. Además, también destacaría que, gracias a los foils, alcanzamos velocidades mucho mayores. Pero bueno, al final son barcos, como dice un gran amigo, Xavi Fernández [oro en Atenas 2004 y plata en Pekín 2008 en 49er].

—Le tocará hacer algo totalmente diferente a lo que había hecho. Supongo que eso también lo asimilará como reto.

—Sí, soy consciente de que estoy en un proceso formativo para llegar a la etapa que me toca lo más preparada posible. La experiencia de la anterior edición me sirve y lo único que tengo que hacer ahora es adaptarla a las características de este barco. Al final, parece que la rápida adaptación es un factor común a todos mis proyectos.

—Una virtud que seguramente habrán valorado para elegirla a usted en este proyecto.

—Sí, es que eso justo era lo que buscaban, dado el tiempo limitado con el que contaban. Alguien que aprendiera rápidamente. Y por eso uno de los patrones se puso en contacto conmigo, porque sabía que a lo largo de mi carrera había demostrado velocidad en el aprendizaje.

—¿Cuál es el plan?

—Yo no voy a estar en las etapas del sur. Me montaré en Brasil, en Itajaí, para hacer la [cuarta] etapa hacia Newport (EE.UU.). Y luego estaré pendiente de lo que depare la competición, viendo a ver si participo en alguna más en Europa. Pero bueno, de momento, paso a paso. Con muchas ganas de que llegue el momento y hacer una buena regata, de lo que seguro sacaré buen aprendizaje. La salida será el 19 de abril y hasta entonces estaré centrada en mi campaña olímpica.

—Faltan más mujeres en la prueba. Usted es la única española.

—La verdad es que sí. Faltan. Estamos en un proceso de cambio, empujando muy fuerte tanto nosotras como ellos, para que cada vez haya más mujeres navegando. Para mí lo más importante, mi única responsabilidad, es abrir la puerta para que las que vengan detrás tengan la posibilidad de tener competiciones de este tipo.

«El Mundial es nuestro objetivo principal; nos jugaremos la plaza para París 2024»

A Echegoyen le ilusiona la The Ocean Race, pero sabe que lo principal será la campaña olímpica de 49er FX.

—Está en un equipo, el Team Europe, que está demostrando que puedo luchar por todo. Eso le motivará aún más, si cabe.

—Sí, es un equipo competitivo. Luego nunca se sabe cómo se va a dar todo, porque la realidad es que son muchos días en el agua, seis meses, y habrá muchas adversidades que pasar. Estoy encantada, además, de participar en una modalidad [Imoca] que parece que será el futuro. Voy con ganas de aprender.

—¿Cómo visualiza ese 19 de abril y los días posteriores?

—Pues el 19 de abril seguramente estemos 24 horas sin dormir [se ríe]. El 20 quizás empiecen las guardias... Lo que recuerdo de la otra vez [con el Mapfre] es que el día de la salida es de máxima concentración. Seguramente los dos o tres primeros días serán muy intensos. Recuerdo además a Itajaí como una de las paradas con más vida y tengo ganas de volver. La salida es un momento de tensión, es también en donde hay más seguimiento, pero luego va bajando la actividad. Al final tienes que ser realista y consciente de que, aunque motiva una buena salida, lo que marca las diferencias es la gestión del resto. De las dos semanas posteriores.

—Buscar los Juegos de París a la vez que colabora en una Vuelta al Mundo. De reto en reto.

—Tengo la suerte de estar en equipos que respetan mi otro proyecto y eso me apasiona.

—Este año hay que clasificarse para los Juegos.

—Sí, el Mundial es nuestro objetivo principal porque en agosto, en La Haya, nos vamos a jugar el pase para el país. Hay que conseguirlo. Hay que trabajar para hacerlo posible y además también buscaremos un nuevo podio Mundial, de nuevo.