Ferrari quiere aguar la fiesta a Verstappen y Sainz es su punta de lanza

David Sánchez de Castro COLPISA

DEPORTES

TOM WHITE | EFE

El piloto madrileño se llevó el mejor tiempo de la jornada de entrenamientos libres del Gran Premio de Singapur, con los Red Bull más atrás de lo esperado

30 sep 2022 . Actualizado a las 18:18 h.

Todo está preparado para que Max Verstappen se proclame campeón del mundo este domingo. El relato se cuenta solo y el calendario es propicio: este viernes el neerlandés cumple 25 años. Sin embargo, y aunque el guion parece escrito para que este fin de semana levante su segundo entorchado, no se lo van a poner fácil.

Que el vigente campeón acabará reeditando el título es cuestión de tiempo, pero sus rivales no están dispuestos a que sea en la primera oportunidad. Los primeros que van a complicarle la vida a Verstappen son los pilotos de Ferrari y, en concreto, Carlos Sainz. Aunque el madrileño tiene muy difícil levantar el entorchado, matemáticamente tiene opciones. Es el último, de hecho, que puede hacerlo: tendría que ganar todo lo que queda y que SuperMax no lo lograra. Es casi más fácil que le toque un Euromillón, pero las matemáticas dicen lo que dicen.

Sainz demostró que está dispuesto a asumir el reto. La jugada de Ferrari es clara: no van a beneficiar al español porque no es su primera espada, sino que es un Charles Leclerc que se encuentra en plena lucha con Sergio Pérez por el segundo puesto y, si le acompaña una tonelada de suerte, con el propio Verstappen por el Mundial. Para Red Bull no debe ser plato de buen gusto verse a ellos fuera del top 3, con el líder del campeonato en cuarta posición y un Checo olvidable en la novena al final del día. Mientras, Sainz y Leclerc son primero y segundo.

El rendimiento mostrado por Ferrari hay que leerlo con cautela. No hay sesión de libres en la que Verstappen y Red Bull muestren todas sus armas, lo que viene a apuntalar el argumento que tienen los que apuestan por ver cada vez más fines de semana con formato sprint: no se verá a nadie taparse ya que los tres días de fin de semana cuentan con acción. Tampoco quieren forzar mucho, ya que son conscientes de que un fallo mecánico puede dar al traste con las opciones para este fin de semana. No parece que vaya a ocurrir nada, pero el exceso de confianza suele ser un rival temible.

En Red Bull, además, han recibido un varapalo en forma de información periodística muy serio. De manera independiente pero simultánea, Auto Motor Und Sport y La Gazzetta dello Sport han publicado que el equipo de las bebidas energéticas y Aston Martin se saltaron «de manera ostensible» el límite presupuestario de 140 millones establecido para la temporada 2021. Si se confirma esta noticia, que la FIA ya está investigando, se arriesgan a una grave sanción que puede ir incluso encaminada a un castigo deportivo. Mercedes y Ferrari, entre otros, piden mano dura por este dopaje financiero que explicaría, según ellos, el buen rendimiento de la pasada campaña y de esta.

Alonso, gris pero con confianza

No será un fin de semana sencillo para Alpine y, en concreto, para Fernando Alonso. El asturiano acabó las dos sesiones por detrás de Esteban Ocon, que ufano seguirá presumiendo de estar por delante del bicampeón del mundo hasta que llegue el domingo. Pero no se puede explicar esto solo por el puro rendimiento del español.

La imagen de Alonso aguardando en su box al final de los primeros libres no auguraba buenas noticias. Los mecánicos del lado del asturiano se pusieron a investigar una posible fuga de aceite en la caja de cambios del coche azul y rosa, algo que podría obligarles a poner una nueva y, en consecuencia, ser sancionados. Por eso, en parte, no apretaron en los segundos libres nocturnos, donde Alonso acabó en una más que mejorable octava plaza. Pocas vueltas y no muy rápidas: no es el mejor inicio posible para el fin de semana en el que se convertirá en el piloto con más grandes premios disputados en la historia de la Fórmula 1, 351.

Al menos, por el lado bueno, siente optimismo con las sensaciones que le han dado las nuevas piezas que han llevado aquí, como un fondo plano rediseñado casi por completo. «La actualización de nuestro coche parece estar funcionando bien hasta ahora», admitía el español, que promete estar más atento a lo que puedan mejorar de cara a la clasificación y, sobre todo, la carrera, que es donde da el do de pecho.