El Deportivo y el Pontevedra hacen tablas tras un derbi centrado en las áreas

DEPORTES

CÉSAR QUIAN

El choque de Riazor brindó numerosas ocasiones y Soriano evitó que el gol de Abelenda diese los puntos a los granates (1-1)

19 sep 2022 . Actualizado a las 09:48 h.

El Dépor y el Pontevedra se repartieron los puntos en un partido de rivalidad que apenas pasó por el mediocampo. De área a área, golpe a golpe, Abelenda adelantó a los visitantes al filo de la hora de juego, pero Soriano evitó la derrota en la recta final. Los coruñeses, que llegaban al partido con más puntos en el casillero que fútbol en las botas, siguen lejos de su mejor versión, mientras el equipo granate se quedó con la miel en los labios de una victoria en Riazor que hubiera premiado su osadía tras el descanso.

La batalla por la posesión comenzó en las pizarras. Borja Jiménez agitó la alineación con las primeras titularidades de Ibai y Rubén Díez, así como con el cambio de posición de Quiles, que dejó la banda para situarse de nueve, el dorsal de su camiseta. Los coruñeses disponían así de más peloteros precisamente frente a un adversario que presume de amasar con criterio, como el Pontevedra.

La primera parte derivó así en un abrumador dominio local frente a un rival agazapado que se estiró a cuentagotas y no chutó una sola vez sobre Mackay. Quizá fue ese desequilibrio, pero el caso es que el partido apenas transitó por el círculo central, sino que se movió en función de los arreones locales. A estos solo les faltó una pizca de profundidad, problema de larga duración en el equipo, y precisión en el último pase.

Los granates, pese a que la pelota nunca les perteneció, no perdieron la paciencia. Serios y firmes, apretaron filas y salieron a la carrera cuando pudieron. En un partido donde no se regaló ni los buenos días, los deportivistas estaban tan avisados de que no podían permitir ni una, que se ganaron dos amarillas de inicio por frenar en falta a Abelenda y Álex González cuando estos se escapaban a la contra.

La mejor ocasión del Dépor no se hizo esperar. A los siete minutos, a pase de Raúl Carnero, Ibai, una de las novedades del once, controló en el área sin dejarla caer y la media vuelta disparó cerca del poste. En primer córner llegó en el minuto 19 y en él reclamó mano de un blanquiazul, ayer de verde.

Los coruñeses volvieron a volcarse en la recta final del período. En su mejor jugada, con un precioso centro con el exterior de Ibai, Antoñito remató un centro chut que se paseó por el área pequeña sin que nadie lo alcanzase. El Dépor rondaba el gol, y acertó Quiles, pero en un fuera de juego por centímetros. Otro movimiento de Rubén Díez, que partió desde la derecha, pero aparecía por todas partes, estuvo a punto de dejar a Carnero solo ante Cortés. Ya en los instantes finales, una nueva carrera del incansable Antoñito la puso en el primer palo, cuando Ibai se relamía solo en el punto de penalti.

El Pontevedra volvió al campo con una marcha más. Nada más comenzar, Villares tuvo que despejar un balón muerto en el área pequeña, pero el partido ya era otro. En el minuto 52, Álex González avisó con un remate alto en el segundo palo. El Dépor contestó por medio de la conexión Rubén Díez-Quiles, pero al goleador, que se revolvió en la frontal y buscó la cepa del poste, chutó fuera.

Los granates no perdonaron luego. En un saque de esquina, la ganaron por alto en la frontal y Brais Abelenda se adelantó a todos, en pos de un balón que ya parecía de Mackay, para batir al meta por alto. Como en la primera jornada, otra vez al Dépor le tocaba remar a contracorriente en casa. En un balón por el que Soriano porfió, Quiles cabeceó alto.

Álex González estuvo a punto de sentenciar en un centro al área que ganó Rufo, mientras a los coruñeses, con el corazón en la boca, le mataban las prisas. De área a área, Calvillo, a nueve del final, se hartó de balón en el mano a mano con Mackay y chutó fuera. ¿Quién podía rescatar a un Dépor grogui? Su jugador más en forma: Mario Soriano. Tras una gran jugada de Quiles por la derecha, el 10 se revolvió rodeado de contrarios y batió a Cortés como quien silba. Santamaría chutó desviado en la prolongación de un partido sin respiro.

Ficha técnica:

Deportivo: Mackay, Antoñito (Trilli, min 73), Lapeña (Olabe, min 74), Jaime, Raúl Carnero (Santamaría, min 60), Villares, Álex Bergantiños, Rubén Díez (Zalazar, min 74), Mario Soriano, Ibai (Narro, min 60) y Quiles.

Pontevedra: Cortés, Bastos, Soto, Churre, Samu Araújo, Miguel Román, Yelko (Borja Domínguez, min 70), Rubio (Calvillo, min 62), Álex González (Gueyé, min 79), Brais Abelenda (Mario Ortiz, min 79) y Charles (Rufo, min 62).

Goles: 0-1, min 57: Brais Abelenda. 1-1, min 87: Mario Soriano.

Árbitro: López Parra (Comité cántabro). Amonestó a los deportivistas Lapeña, Antoñito, al técnico Borja Jiménez, Narro, así como a los visitantes Álex González, Bastos, Román, Yelko, Rufo, Gueyé, Cortés