La explosión de Carlos Alcaraz cumple un año

Enric Gardiner COLPISA

DEPORTES

CATHRIN MUELLER | REUTERS

El gran objetivo del murciano es ser el número uno más joven de la historia, logro que está a tiro, puesto que tiene año y medio por delante para superar a Lleyton Hewitt, que lo consiguió con 20 años

26 jul 2022 . Actualizado a las 16:22 h.

Era fácil avistar hace un año que Carlos Alcaraz iba a pegar un salto importante. En estas fechas conquistó su primer título y dio el primer manotazo de una progresión que había ido cuidando poco a poco, con alternancias entre el circuito Challenger y el ATP y con una tercera ronda en Roland Garros que llamaba la atención de todo el mundo el tenis. Pero a finales de julio, en Umag (Croacia), en uno de esos pocos torneos de tierra batida que se disputa después de Wimbledon, Alcaraz dio el paso definitivo. Conquistó su primer título ATP en la final contra Richard Gasquet (6-2 y 6-2), con 18 años, 2 meses y 14 días.

Más precoz que Pete Sampras, Andy Murray, Novak Djokovic (19 años) y Roger Federer (20 años. Rozó alcanzar a Rafael Nadal, que levantó su primer título en Sopot (Polonia) con 18 años, dos meses y ocho días. Curiosamente, en la inscripción que le dio la ATP por levantar aquel primer título en 2004 se lee Rafael Nadel, no Rafael Nadal. Un error que no se repetiría en los 91 títulos que le siguieron.

Un ascenso sostenido

A aquel título en Umag, que le mete entre los 49 españoles en haber ganado al menos un trofeo, le siguieron los cuartos de final en el US Open, su gran presentación ante el público. En el mejor escenario posible, con el palomitero público neoyorquino en las gradas, Alcaraz empezó a desprender el aroma a campeón que le ha acompañado por todas las pistas del mundo y que le ha convertido en el favorito de la afición.

La primera victoria ante un top 5, contra Stefanos Tsitsipas en el US Open, primeras semifinales en un ATP 500 en Viena, victoria en las Next Gen Finals y entre los mejores 50 del mundo antes de terminar el año. Todo para un tenista que menos de dos años antes estaba fuera de los 500 mejores del circuito.

2022 fue el trampolín inesperado. Un salto de muchos kilómetros de distancia para un chico que no cumpliría los 19 años hasta mayo. El primer impulso llegó en Río de Janeiro, con cinco triunfos que le dieron su primer ATP 500, el más precoz en conseguirlo desde Nadal, que se embolsó el primero en Acapulco 2005. Y le siguió el Masters 1.000 de Miami, donde Alcaraz se coronó como el sexto en la historia en ganar un torneo de esta categoría, a tan solo diez días de cazar a Nadal y su Montecarlo 2005.

El primer año en la élite de Alcaraz ha estado marcado por la precocidad, como confirmaron más tarde los títulos en Barcelona y Madrid, pero también por la cautela, como demostró la derrota en Roland Garros ante uno de sus rivales para los próximos años como Alexander Zverev, y en Wimbledon ante Jannik Sinner.

Incluso lo de Hamburgo es también un toque de atención, porque cayó ante un tenista de edad similar como Lorenzo Musetti, que tiene 20 años, y que rompió su idilio con las finales. Hasta el pasado domingo, Alcaraz había ganado las cinco finales ATP que había disputado, además de añadir ahí las Next Gen Finals.

La final en tierras alemanas, eso sí, le supone meterse por primera vez en su carrera entre los cinco primeros del ránking, con 19 años, dos meses y 20 días, el octavo más precoz de la historia. Solo le superan Sampras, Nadal, Mats Wilander, Bjorn Borg, Andre Agassi, Boris Becker y Michael Chang. Por detrás quedan Djokovic (19 años, 11 meses y ocho días) y Federer (21 años, 5 meses y 19 días).

Principal favorito

Con final o título en Umag, Alcaraz ascenderá hasta el cuarto puesto, por lo que podría ser el sexto más joven en conseguirlo. El gran objetivo es ser el número uno más joven de la historia, logro que está a tiro, puesto que tiene año y medio por delante para superar a Lleyton Hewitt, que lo consiguió con 20 años, 8 meses y 23 días. Eso sí, ahora mismo le separan casi 3.000 puntos de la cima marcada por el ruso Daniil Medvedev.

Hace un año entró a Umag como el número 73 del mundo y ahora lo hace como el principal favorito a levantar el título. Es el primer cabeza de serie y debutará este miércoles contra el ganador del duelo entre Jiri Vesely y Federico Delbonis. En el horizonte de la final aparece un posible duelo ante Sinner, su verdugo en Wimbledon. Umag ya no ofrece los atractivos de hace un año, pero mantiene un punto sentimental en la carrera de Alcaraz, por eso voló directamente desde Hamburgo para no perderse la cita en Croacia.