Fernando Rey Tapias
Comienza en Paris un Roland Garros de más difícil pronóstico que ninguno de los anteriores y en el que el estado en el que lo van a afrontar varios de los favoritos es una incógnita que solo el desarrollo del torneo irá despejando.
Por una parte, se hace raro ver que Rafa Nadal, con su dominio absoluto y su historial en el campeonato, no figure entre los primeros cabezas de serie lo que supone que, en el mejor de los casos de que su maltrecho pie le deje competir con normalidad, el sorteo ha deparado que si ambos cumplen en las anteriores eliminatorias, Djokovic y el mallorquín se enfrentarán en cuartos, en lo que sería una final anticipada.