El italiano repitió en el Gran Premio de las Américas lo logrado en la primera carrera del año en Catar, con un segundo triunfo que le devuelve a lo más alto de la general
11 abr 2022 . Actualizado a las 14:47 h.La carrera de moto GP del Gran Premio de las Américas fue un compendio de muchas de las cosas buenas que tiene la categoría en estos momentos. Una prueba intensa, emocionante, igualada y con varios protagonistas. El primero, Enea Bastianini, un piloto que había sorprendido Losail con su primer triunfo en la clase reina, y que repitió su logro con un esquema parecido. De inicio, se mantuvo delante sin volverse loco en la primera parte de la carrera, en unos giros dominados por Jack Miller, siempre con Jorge Martín a rueda. Luego, volvió a exhibir su capacidad de gestión de los neumáticos en tramo decisivo, cuando atacó en el momento oportuno y fue capaz de marcar la vuelta rápida de carrera a seis giros para la conclusión. «Esta victoria es mejor para mí que la primera, porque me demuestro que soy constante», valoraba el vencedor tras la carrera.
La lucha por el segundo puesto sí que se decidió en los últimos instantes, con Álex Rins, que salía séptimo, como protagonista. «No pensaba que llegaría al grupo de cabeza, la verdad. La pelea con Miller ha sido brutal», añadía el piloto barcelonés, que alcanzó su segundo podio consecutivo y está mostrando eso de lo que adoleció antes: regularidad y precisión para no cometer errores. Hasta el momento, está logrando batir a su compañero de equipo, Joan Mir, que terminó cuarto.
Remontada al estilo Márquez
El último de los protagonistas de moto GP no fue otro más que Marc Márquez, sobre el que recaía la sospecha de que, pese a su discurso cauto, estaba para pelear por ganar. Y si no lo hizo, fue por el desastre de su salida, aunque habría faltado por ver también si estaba para luchar el triunfo a Bastianini, que ya en los entrenamientos había mostrado un ritmo muy parejo al del español. Márquez se quedó clavado en la parrilla y llegó el último, vigesimocuarto, a la primera curva de carrera. La meta la cruzó en sexta posición, recortando constantemente la ventaja del que marchaba primero, hasta que ese puesto lo ocupó el que terminaría siendo el ganador.
Fue una remontada al estilo Márquez, con adelantamientos a todos sus rivales, eso sí, con más dificultades a la hora de rebasar a Quartararo, que terminó justo por detrás de él y sacando la garra del campeón. En cualquier caso, el piloto de Cervera demostró en su circuito talismán que está para pelear por todo, y eso debería incluir el Mundial, que mantiene su apretada clasificación. El líder tiene cinco puntos de ventaja respecto a Rins, quince sobre el quinto (Quartararo), 33 sobre el décimo (Martín) y 40 sobre Márquez. Con 17 carreras por delante.