La selección española estrecha el círculo en Cataluña

Óscar Bellot COLPISA

DEPORTES

Rodrigo Jiménez

Dieciocho años después, el equipo nacional regresa a Barcelona para seguir engrasando la maquinaria de cara al Mundial de Catar frente a la modesta Albania

25 mar 2022 . Actualizado a las 16:29 h.

Dieciocho años después de que los goles de Joseba Etxeberria y Rubén Baraja le sirviesen al combinado que entonces dirigía Iñaki Sáez para remontarle a Perú el tanto con el que Nolberto Solano había puesto por delante a la Blanquirroja en el Estadio Olímpico de Montjuïc, la selección española regresa mañana a Barcelona (19.45 horas, La 1). Una ausencia de casi dos décadas en un territorio siempre caliente por las tensiones nacionalistas, pero que también tiene ganas de reencontrarse con selección, que en ese vasto período de tiempo ha levantado un Mundial y dos Eurocopas. Albania es la piedra de toque escogida para la tan esperada normalización de relaciones, al menos en su derivada deportiva, que tendrá al RCDE Stadium como escenario y la preparación para la exótica Copa del Mundo de Catar como excusa oportuna a la hora de intentar devolver las aguas a su cauce y cumplir así con uno de los propósitos de Luis Rubiales cuando ascendió a la presidencia de la Federación.

Tras sellar el pasado mes de noviembre en el sevillano estadio de La Cartuja el pasaporte para Catar con aquella trabajadísima victoria frente a Suecia que le permitió eludir una envenenada repesca, el fresco y pujante bloque de Luis Enrique inicia su puesta a punto para el torneo que se celebrará en tierras asiáticas entre el 21 de noviembre y el 18 de diciembre con un amistoso frente a Albania que debe servir para que el técnico asturiano siga perfilando el grupo con el que afrontará una cita en la que hay muchas esperanzas depositadas.

El gran papel que realizó

El equipo nacional en la pasada Eurocopa, donde logró sobreponerse a un cúmulo de problemas para terminar alcanzando unas semifinales en las que luchó hasta el último momento con la a la postre campeona Italia y la enorme madurez que demostró meses después en la final four de la Liga de Naciones, donde una más que discutible decisión arbitral la descabalgó en el duelo decisivo contra Francia librado en San Siro, han servido para avivar la ilusión de la parroquia española y apuntalar el proceso de renovación acometido por Luis Enrique con un combinado que venía de estrellarse en el turbulento Mundial de Rusia, después de caer también con estrépito cuatro años antes en Brasil y no conseguir levantar tampoco cabeza en el Europeo de Francia.

Pero la irrupción de valores de presente y futuro como Ferran Torres, Dani Olmo, Gavi o Pedri ha dado un impulso a una selección que, por primera vez desde que tocase el cielo en el Soccer City de Johannesburgo en el 2010, comparecerá sin ningún miembro de la generación dorada del fútbol español. Luis Enrique dejó en casa a Sergio Busquets para dar descanso a un exprimidísimo veterano al que, por otra parte, no necesita monitorizar porque ya tiene plaza reservada para la que será su última gran aventura con la selección. La capitanía pasa de forma provisional a Jordi Alba, que se ha ganado una vida extra con el preparador gijonés a base de notables actuaciones con el Barça.

Paso al frente

El conjunto azulgrana sigue conformando la espina dorsal de la selección, con David Raya y Hugo Guillamón como principales novedades, la baja de última hora de un Raúl de Tomas que iba a ser la gran atracción en el recinto perico y una buena mezcla de experimentados y jóvenes que deberán seguir haciendo méritos porque Luis Enrique no entiende de amistosos, pese a que el círculo es cada vez más estrecho. Bailan pocos puestos y la competencia es máxima. Hora de dar el do de pecho para los 22 convocados, a los que el seleccionador quiere ver con ambición y hambre, pese al escaso pedigrí de Albania.

El combinado balcánico se ha medido en siete ocasiones a España, la última hace más de cuatro años en el estadio Rico Pérez de Alicante, y siempre ha hincado la rodilla. Una cascada de derrotas entre las que sobresale el 9-0 que encajó a finales de 1990 en el Ramón Sánchez Pizjuán. Detenta la posición número 65 en el ránking FIFA y no es el adversario más oportuno para examinar el cuajo de la selección española ni para motivar un lleno en el RCDE Stadium que también se ve dificultado por el costo de las entradas en estos tiempos de apuros por la inflación galopante que ha puesto en jaque a tantas economías familiares. Pese a ello, se espera un ambiente digno de lo que hay en juego: que el conjunto nacional sea la casa de todos. Sin excepciones.

Alineaciones probables

España: Unai Simón, Azpilicueta, Eric García, Laporte, Jordi Alba, Carlos Soler, Rodri, Pedri, Sarabia, Ferran Torres y Dani Olmo.

Albania: Strakosha, Ismajli, Kumbulla, Hoxhallari, Roshi, Cekici, Ramadani, Keidi Baré, Hysaj, Rey Manaj y Uzuni.

Árbitro: Trustin Farrugia (Malta).