Laporta dijo que el objetivo es «reducir a unas cantidades razonables la masa salarial» y felicitó «a los empleados del club que lo están haciendo posible», aunque «aún queda mucho por hacer».
En este sentido, el presidente admitió que en el mercado «hay equipos interesados en fichar a los jugadores del Barça que se echan atrás cuando ven sus salarios».