Paco Gento, el gran 11 de la historia blanca

Manuel García Reigosa
M. G. Reigosa EL PERISCOPIO

DEPORTES

Real Madrid

18 ene 2022 . Actualizado a las 16:27 h.

Mis recuerdos de fútbol arrancan con las primeras retransmisiones televisivas en color. No llegué a ver jugar en directo a Paco Gento, pero me quedaron muy grabadas dos reflexiones sobre el extremo zurdo, las dos en la misma dirección. Una me la trasladó mi tío Serafín: «Gento era una bala. Corría tanto que podía llegar antes al balón dando un rodeo que su par yendo en línea recta. Pero era todavía más peligroso por cómo frenaba que por su velocidad. Se quedaba clavado y ahí tomaba ventaja porque el defensa seguía». Esa descripción es muy parecida a la que le leí, tiempo después, a Alfredo Di Stéfano: «Gento seguía, arrancaba y frenaba rapidísimo durante todo el partido. Correr es importante, pero solo si sabes jugar, porque una cosa es darle a la pelota y otra interpretar el fútbol». Y en eso Gento, apodado La Galerna del Cantábrico, fue como los buenos vinos que mejoran con el paso del tiempo.

Si el llamado deporte rey hiciese suya una de las tradiciones del baloncesto, la de retirar el dorsal de aquellos jugadores que dejan una huella inigualable en el equipo, en el Real Madrid nadie hubiese vuelto a lucir el 11 de Paco Gento después de que dejase las canchas, tras dieciocho temporadas en el colectivo blanco en las que conquistó seis copas de Europa y doce ligas.

Su legado va más allá de sus títulos. Durante casi dos décadas fue el dueño de la banda izquierda en el Bernabéu, en el legendario equipo en el que compartió escudo con Di Stéfano, Puskas y Kopa, y más tarde en el llamado Madrid yeyé junto a Amancio, Grosso, Pirri, Sanchís y Zoco, entre otros. Gento fue grande en dos de las grandes etapas del conjunto blanco, y eso son palabras mayores, más incluso que sus conquistas.

El fútbol pierde a uno de sus ilustres de las décadas de los cincuenta y los sesenta, alguien que siempre sobresalió por su discreción, por su juego, por sus pases y por sus goles. Así será recordado.