The Best suena pretencioso

m.g.reigosa EL PERISCOPIO

DEPORTES

Harold Cunningham / POOL

17 ene 2022 . Actualizado a las 21:44 h.

Por mucho que le pueda doler a Infantino, The Best se asocia más a Tina Turner que a los pretendidos óscar del fútbol. Todavía les falta recorrido y tradición para convertirse en una cita muy presente en el calendario de los aficionados, y más desde que los galardones de la FIFA vuelven a ir por un lado y los del Balón de Oro de France Football por otro. Y menos en tiempos de pandemia, porque las ceremonias telemáticas son tan desangeladas como las canchas sin público.

Lo mejor de estas galas es que avivan los debates y la controversia, porque es imposible que llueva a gusto de todos. En la categoría del mejor entrenador en el fútbol masculino, Tuchel fue el ganador por delante de Guardiola y Mancini pese a ser destituido en el PSG a mitad de curso. Pesó más la otra mitad de temporada y el título de Champions al frente del Chelsea. En el femenino, a Lluís Cortés tampoco le bastó ser el gran dominador de la campaña con el Barça. The Best went to Chelsea again, y no es el título de una canción, porque se lo llevó Emma Haye. Y sonó la misma melodía con los cancerberos, porque Mendy, del Chelsea, se impuso Donnarumma, que selló la portería de italia en la Eurocopa, y al alemán Neuer. Solo la guardameta del Olympique de Lyon, Christiane Endler, evitó el póquer del equipo inglés. Le ganó la partida a Berger, del Chelsea, y Labbé, del PSG.

Probablemente el premio que concitó más unanimidad fue el que recibieron las aficiones de Dinamarca y Finlandia por su comportamiento en el partido de la resurrección de Eriksen. Se reanudó después de que la UEFA lo hubiese suspendido en un primer momento y decidiese completarlo ese mismo día tras constatar que el centrocampista estaba «despierto». Así lo explicó y justificó el presidente de la UEFA, Aleksandar Ceferin, a quien le faltó decir show must go on. Tal y como indicó el propio jugador días más tarde, llegó a estar «cinco minutos muerto» sobre el césped. Pero se jugó.

En el apartado a la mejor jugadora, la barcelonista Alexia Putellas, que ya tenía el Balón de Oro, hizo doblete. Sorprendentemente, ni ella ni sus rivales, Jennifer Hermoso y Sam Kerr, fueron incluidas en el mejor once femenino.

En el cuadro masculino Lewandowski se impuso esta vez a Messi y a Salah. Sin duda, el delantero polaco firmó un curso arrollador. Y también entró en el mejor once, al igual que Messi. Y Haaland y Cristiano Ronaldo. Donnarumma, Alaba, Rubén Dias, Bonucci, Jorginho, Kanté y De Bruyne completaron ese equipo, que no parece muy equilibrado ni fácilmente gobernable.