El Athletic presume de futuro con Sancet, Zárraga y los Nicos

La Voz

DEPORTES

ALBERT GEA

A pesar de la derrota, los aficionados vascos tienen motivos como para ilusionarse con el prometedor futuro que tienen por delante con jóvenes que apuntan muy buenas maneras

17 ene 2022 . Actualizado a las 09:04 h.

El Athletic demostró un gran señorío durante la celebración del Real Madrid. La plantilla bilbaína se quedó a presenciar todo el festejo y los jugadores no se quitaron la medalla de subcampeones. A pesar de la derrota, los aficionados vascos tienen motivos como para ilusionarse con el prometedor futuro que tienen por delante con jóvenes que apuntan muy buenas maneras.

Sobresalió Oihan Sancet (Pamplona, 2000). El delantero sabe cómo quedarse solo para recibir el balón. Se cuela con suma facilidad entre el lateral y el central o el pivote y los zagueros y es capaz de fabricarse sus propias ocasiones sin necesidad de que le lleven el balón al área. Quizás su gran déficit sea el físico. Acusó el paso de los minutos en la segunda mitad y Marcelino lo cambió.

Ante la ausencia de Vencedor, otro de los cachorros de Lezama que brilló en esta Supercopa fue Oier Zarraga (Bakio, 1999). El pivote es un seguro. En un contexto de poca posesión, ya que el Madrid era el dominador de la medular y no permitía al rival demasiados toques, el rojiblanco hizo pleno de efectividad en el pase (31 aciertos de 31 intentos). Y además colaboró en la destrucción.

Los otros dos jóvenes que participaron en la final fueron los Nicos. Williams (Pamplona, 2002) fue el héroe de la semifinal, pero ante el Madrid estuvo más apagado. Tiene mejor pie que su hermano Iñaki. En cuanto a Nico Serrano (Pamplona, 2003), el extremo demostró personalidad y desparpajo. Entró en el 81, tocó 18 balones y disparó dos veces a puerta (algo que no había hecho el Athletic hasta ese momento).

A ellos hay que sumar el central Dani Vivian (Vitoria, 1999) y el mediocentro Unai Vencedor (Bilbao, 2000), que fueron baja en la cita de Arabia.