Firouzja, la amenaza de Carlsen

antía s. aguado REDACCIÓN

DEPORTES

FIDE

Con solo 18 años, y con un juego arriesgado y mucho talento, ya es número dos del ránking, el único rival de futuro que motiva al actual campeón

26 dic 2021 . Actualizado a las 19:42 h.

Haz más de lo que te haga verdaderamente feliz, escribió un día Alireza Firouzja (Irán, 2003) en redes sociales. Un mantra que ha cumplido a rajatabla. Con 18 años, ya es el número dos del ránking mundial… y el único con el que Carlsen volverá a defender el título en un campeonato del mundo de partidas clásicas. De hecho, el aspirante ya ha dejado atrás el récord de precocidad que tenía el campeón, tras superar la barrera de los 2.800 puntos Elo (sistema de puntuación en ajedrez) y convertirse en el jugador más joven de la historia en lograrlo.

Creativo y dinámico. Así definen el estilo de juego del iraní Alfredo de la Fuente y Óscar de Prado, maestro candidato de la FIDE y maestro y entrenador FIDE, respectivamente. «Es un jugador eminentemente táctico, un jugador de ataque. Le encanta jugar de manera creativa, vistosa y arriesgada», expone De la Fuente. Es precisamente eso lo que le diferencia del noruego. Un estilo contrapuesto que encuentra en el riesgo su factor estrella. «Juega un estilo bastante universal. Juega bien cualquier tipo de posiciones, tanto tácticas como más tranquilas. Está muy preparado y estudia mucho», sintetiza De Prado.

Arriesgarse puede traer problemas a Firouzja, sobre todo en la gestión de emociones. «En una partida de ajedrez al máximo nivel es muy complicado mantener la cabeza fría durante todas las horas», explica De la Fuente. Y es que jugar continuamente valorando el nivel de peligro es muy difícil. La clave está en encontrar el equilibrio entre el riesgo y la efectividad. «Tiene que coger experiencia, y gestionar esa máxima tensión que hay en la élite», relata el maestro candidato de la FIDE.

Aunque cuenta con un gran nivel, todavía hay diferentes aspectos del juego que necesita pulir: los finales y las posiciones técnicas. Sobre todo, si quiere quitarle a Carlsen el título de campeón del Mundo. «El noruego es el mejor con diferencia en los finales, en partidas de muchas horas. Marea al rival hasta que se equivoca», matiza Óscar de Prado. En cuanto a las posiciones técnicas, son, precisamente, las partes de su estilo que le son menos naturales al iraní. A base de trabajo, «tendrá que forzar este tipo de posiciones, aunque él no quiera. Le saldrá natural otro tipo, pero para ser campeón mundial no puedes jugar buscando el riesgo y los ataques continuos», sentencia De la Fuente.

Firouzja tiene un talento que ha llegado pisando fuerte. Con su corta edad, es un jugador que ha progresado muy rápido. Con 12 años ya empezó a destacar a altos niveles. En el 2016, la FIDE le otorgó el título de Maestro Internacional, y estos dos últimos años han marcado para él un antes y un después. «Ha dado el salto a la élite. Desde que ha aparecido, está claro que es una figura que va para arriba», relata De la Fuente. Con la llegada de la pandemia, los torneos online se abrieron paso. Y tanto en estos como en los presenciales, «su progresión ha sido constante y rapidísima», explica el maestro candidato de la FIDE. Sin embargo, De Prado matiza sobre la muy buena racha que lleva el iraní. Y advierte que hay que ser cauto con el crecimiento del joven: «Hay que ver hasta cuán de grande es esa progresión».

¿Hasta qué punto este joven talento podrá superar a Carlsen? «De los últimos años, es el que mejor pinta tiene», afirma De Prado. El iraní, por el momento, ha logrado clasificarse para el siguiente Torneo de Candidatos. Un hecho difícil y que le transmite al maestro y entrenador FIDE la sensación de que será un «retador y, posiblemente, un campeón mundial en los próximos años». Pero no quiere hablar de plazos. Es joven, y puede ser que para el próximo Mundial no esté listo, pero eso no le impedirá ser «uno de los favoritos… o el favorito».

Si algo ha demostrado el joven iraní es su intención de arrebatarle la corona a Carlsen. Desde pequeño tenía «madera de campeón», y no hay mejor motivación que «destronar a Carlsen, y pasar a la historia por ello», explica De la Fuente. Por el momento, queda esperar a su participación en el próximo Torneo de Candidatos de clásicas. Si quiere medirse contra el noruego, va a tener que «enfrentarse a un ciclo de candidatos durísimos, una tarea titánica… pero el talento que tiene se lo permitirá», afirma el maestro candidato.

Su talento en las rápidas

A pesar de ser un jugador prodigioso en cualquier modalidad, ne las partidas rápidas —cuyo Mundial comenzó ayer con Firouzja y Carlsen en liza—, «con menos tiempo para pensar, es donde su talento es tan espectacular y natural», explica De la Fuente. En estas partidas, los jugadores deben considerar las variantes a largo plazo en muy poco tiempo. Y ese es uno de sus talentos: «Firouzja es capaz de ver en un segundo lo que a lo mejor su contrincante ve en tres o cuatro, y eso marca la diferencia», prosigue. No obstante, De Prado incide en que no es el número dos del mundo en rápidas. Lo es en la modalidad de clásicas. «Se defiende bien en partidas rápidas, pero a día de hoy su progreso está en las lentas, que es en donde lo necesita. Y lo está demostrando», sentencia.

El desafío de jugar al ajedrez en Irán

Hubo un tiempo en el que en Irán se prohibió el ajedrez por cuestiones religiosas. Diez años que no impidieron que, en la actualidad, el país sea una fábrica de talento. «Seguramente está viviendo su mejor momento. Hay unos adolescentes muy interesantes que vienen pegando fuerte», explica Alfredo de la Fuente. Y entre tantos destacados, Firouzja sobresale, aunque ahora sea con otra nacionalidad. Hace dos años se marchó de Irán para jugar, libremente, al ajedrez. Su país obliga a sus jugadores, siempre que se enfrenten contra un israelí, a no presentarse a la partida. El propio Firouzja tuvo que acatar esta norma en varias ocasiones, hasta que dijo basta. Desde el 2019 no compite bajo la bandera iraní.

Nada más hacerlo, participó en el Mundial de rápidas, donde obtuvo la plata y en el que jugó bajo la representación de la FIDE. Irán había impedido a sus ajedrecistas disputar este campeonato. Por un error, varios jugadores se habían enfrentando a israelíes. «Firouzja dijo que él iba a ir al Mundial. Y se marchó de Irán», expone De Prado.

La FIDE asegura que vigila a la federación Iraní. Sin embargo, los expertos aseguran que todavía realiza esta práctica. «En los últimos torneos disputados siguen sin jugar contra israelíes. Veremos qué pasa. De momento, no se está cumpliendo», afirma De Prado. La FIDE, tradicionalmente, «no interviene en estas situaciones», sentencia De la Fuente.

Tras su huida, Firouzja se instaló en un pueblo de Francia. Este mismo año se ha nacionalizado francés. Un país idóneo para seguir progresando, una potencia europea en ajedrez. «Va a tener unas condiciones óptimas para los próximos años y asaltar el Mundial», indica De la Fuente.

Poco se sabe de su vida privada. Se desconoce quién puede ser su entrenador. «Lo que es seguro es que ha trabajado con un gran maestro, Iván Sokólov. La Federación Iraní llevó a varios entrenadores buenos, entre ellos este», De Prado. Desde un pueblo francés, luchará por destronar a Carlsen y ser el próximo número 1.