El Barça no ha aprendido nada de las películas americanas

DEPORTES

Alejandro García | EFE

20 oct 2021 . Actualizado a las 21:07 h.

Pese a que el Barcelona sumo sus primeros tres puntos en la fase de grupos de la Liga de Campeones, el 1-0 cosechado por el equipo de Koeman en el Camp Nou resultó más esperanzador para el Real Madrid, próximo rival de los culés en Liga, que para el propio Barça.

Son días durísimos para el aficionado blaugrana que no reconoce ni su propia camiseta. Fea en la Champions y terrible en la Liga por dictado del márketing. Teniendo en cuenta la crisis financiera que vive la institución, tal vez hubiese sido más inteligente hacer una prenda que no produzca rechazo para, al menos, asegurarse un éxito de ventas textil. Ya que no venden a Umtiti o Coutinho y que no sacan dinero por Messi y Griezmann, por lo menos vender ropa.

Si algo han enseñado las películas americanas es que, como norma general, no hay que dejar medio muerto a alguien del este de Europa. Como los héroes de Hollywood son tan humanos y piadosos nunca los rematan cuando tienen oportunidad. Entonces se arrastran entre sangre y se levantan. Y dos años después tenemos una secuela que nos podríamos haber ahorrado perfectamente.

El Barcelona dejó desangrándose al Dinamo de Kiev, pero no lo remató. Los ucranianos ganaron dos recopas en su día, pero, a día de hoy, no tienen nada mínimamente parecido a un Oleg Blokhin. El equipo de Koeman dominó en la primera parte y en la segunda mostró una desgana terrorífica que merecía un mayor castigo. Pero este Dinamo no daba más de sí.

A ver qué pasa con este Barcelona. La imagen no es ni mucho menos buena. Es más, uno ya no sabe qué acerca más a la destitución a Ronald Koeman: si las victorias o las derrotas.

El Camp Nou trata de ilusionarse. Corean como un ídolo a Agüero, el tercer jugador de más edad en debutar en Champions con el Barça. Pero sigue dependiendo de Piqué.