Tras la crisis de lesiones veraniega, el Leyma arranca hoy un nuevo curso
08 oct 2021 . Actualizado a las 10:04 h.El Leyma Coruña arranca hoy una nueva temporada. Roberto Cibeira, presidente de la entidad, dijo durante una visita a uno de los patrocinadores del club que el equipo coruñés es una entidad en continuo crecimiento. Pero claro, tras dos temporadas finalizando en tercera posición la Liga y coqueteando con el ascenso a la ACB, el margen para crecer es cada vez más pequeño. Porque tras otro estirón ya se asoma la élite. Sergio García será por tercer curso competitivo el entrenador de los naranjas. «Las dos últimas temporadas las consideraría muy buenas. ¿Mejorarlo? Es deporte y es nuestra ambición. Trabajamos para eso. ¿Difícil? Muy difícil», reconoce. Poco a poco. La primera meta volante se sitúa en Cáceres, lugar que la suerte ha elegido para el inicio hoy (20.45, LaLigaSportsTV) de una nueva aventura llena de esperanzas. Lo hace tras recuperar a varios efectivos tras una pretemporada llena de lesiones que obligó a cancelar el último partido de preparación.
—¿Es mejor este equipo que el del año pasado?
—Espero que sí. Siempre intentamos mejorar, pero comparar es un poco básquet ficción. Es el contexto de la Liga lo que te marca todo, pero estamos muy contentos con el equipo que hemos hecho. Creo que podemos haber mejorado en control de los partidos y que nuestro nivel físico, aunque la gente piense que no, es, como mínimo, igual. Incluso diría que algo mejores.
—Es que no se renovó a Belemene, que era una atlas anatómico de los músculos del cuerpo. Hoy será su rival tras firmar en Cáceres.
—Son temas de contratos, cantidades y demás. Es un chico excelente, un jugador muy potente para esta competición, pero en las circunstancias en las que se daba el nuevo contrato decidimos que no siguiese. En el resto de posiciones, con Mo y Augustas, tendremos a los dos bases más físicos de toda la Liga. Y esperamos recuperar a Diagné; tenemos a Hamilton y Nick Ward, un juego interior muy potente. Mikel Sanz físicamente está muy bien, lo mismo que Kadre o Zach.
—El puesto de base es este año una de las fortalezas del Leyma: Soluade, Álex Hernández y Pecius.
—Sí. Siempre intentamos traer a los mejores jugadores que podamos, pero creo que hemos salido ganando. Álex controla los tiempos del partido perfectamente y Mo ya tiene la experiencia de ese tipo de partidos, además de incorporar a un jugador que físicamente es top, de los que nos gustan. Junto con Augustas, creo que es el mejor defensor de la competición.
—Han ido a pescar a Canadá y se han traído dos piezas, ¿cómo acaban en ese mercado?
—Ni son del mismo agente y el hecho de que jugasen en el mismo equipo fue una casualidad. A Kadre lo teníamos mirado y lo intentamos traer cuando nos pasó lo de Augustas, pero la normativa nos lo impidió. En el momento en el que terminó la Liga, fue uno de los primeros jugadores a analizar. En el caso de Nick Ward, lo conocíamos más de la G-League [liga de desarrollo estadounidense]. El mundo debe de ser muy pequeño que, por casualidad, los dos acaban en Ottawa en el mismo equipo. Casualidades de la vida.
—¿Quizás la de alero sea la posición menos potente?
—Conozco muy bien a Mikel Sanz. Evidentemente es un jugador en proyección y no es una realidad de la Liga como puede ser Lofberg. Con Lofberg tenemos a un jugador claramente top de la Liga en esa posición y creo que Mikel va a ir para arriba. Hemos hecho una pareja muy compensada. Yo estoy contento.
—¿Un puesto de ascenso será para el Estudiantes?
—Antes de arrancar, creo que es lo evidente. Han hecho un equipo exageradamente bueno y ellos mismos, si no consiguen quedar primeros en la liga regular, lo considerarán, entre comillas, un fracaso. Es la LEB, es muy complicado, incluso para ellos. No creo que se vayan a pasear, pero están a otro nivel. Un poco por debajo veo al Granada. Luego, si viene Marc Gasol a Girona, evidentemente se ponen a la cabeza de las apuestas. Un campeón del mundo antes de ayer... Y luego hay un grupete ahí con Castellón, Alicante, Palencia o nosotros para estar en la pelea.
—Le han dado dorsal a Jorge García, un chico de la cantera.
—Jorge es un escolta que va a estar en dinámica del primer equipo, pero tiene compromisos académicos y no puede estar en todos lados. Normalmente, a los partidos de fuera, no viajará. Queríamos tener a un chico de A Coruña para que estuviese en nuestra dinámica, nos ayudase en los entrenamientos. Su nivel no es la LEB Oro, pero tiene mucha ilusión y un compromiso enorme. Nos ayuda en el día a día como también nos están ayudando Santi, un chico del júnior, los hermanos Sergio y Raúl... Tenemos una serie de chavales que nos han salvado la pretemporada.
«El sistema de competición es este año infinitamente mejor»
Sergio García parece haber hecho borrón y cuenta nueva tras quedarse a una canasta de acceder a la final por el ascenso. Centrado ya en la presente campaña, analiza qué faltó tras morir en la orilla ante el Granada.
—Último partido de la temporada pasada. Derrota contra el Granada y eliminación. ¿Qué faltó?
—Yo me quedo mucho con la baja de Augustas. Nos faltó mucho control. Es muy diferente la liga regular al play-off. Necesitas jugadores de esos que te controlen el ritmo del partido y eso nos faltó eso. Al final tuvimos que cambiar para la parte final del campeonato roles, posiciones y demás y eso nos afectó. La diferencia de esa serie final fueron Costa y Christian Díaz, los bases del Granada, que tuvieron mucho control de los ritmos del partido.
—También suman experiencia en ascensos. ¿Pagaron esa inocencia el año pasado? Permítame la expresión, ¿pecaron de pardillos?
—Sí. Cuando conseguí ganar la Liga en Palencia, el novato o el pardillo era yo. Pero tenía jugadores que lo habían conseguido varias veces: Urko Otegui, Marc Blanch, Romà Bas, Dani Rodríguez, Dani Pérez. Mi experiencia con ellos fue la de que viven esas situaciones con más tranquilidad y naturalidad. Eso ayuda.
—¿Le gusta la «final four»?
—Un poco menos. Igual soy más clásico y me gustaba más el formato play-off a toda la serie. Es verdad que en función de cómo lleguen los equipos te puede abrir el abanico de posibilidades, estar bien el fin de semana y dar la sorpresa. Pero el sistema de competición es infinitamente mejor de lo que era el año pasado, una primera ronda de play-off me gusta y si tenemos la suerte de estar en la final a cuatro diré si me gusta más o menos.