Susana Rodríguez Gacio: «No podio decateime da que liamos»

míriam v. f. VIGO / LA VOZ

DEPORTES

M.Moralejo

La viguesa regresa a casa con el oro en paratriatlón de Tokio al cuello más su diploma en los 1.500 metros

01 sep 2021 . Actualizado a las 22:07 h.

«Feliz é a palabra, non hai outra». La primera frase que salió de la boca de Susana Rodríguez Gacio, con su medalla de campeona paralímpica de triatlón al cuello y su diploma en 1.500 a mano, llegaba después de un emocionado abrazo con sus padres en el aeropuerto de Peinador. La deportista viguesa irradiaba felicidad tras haber logrado la mejor recompensa a cinco años de duro trabajo.

Lo recordaba la doctora de profesión, que sufre una discapacidad visual severa debida al albinismo, al referirse al último año: «Foi duro. Houbo dificultades pola pandemia para todos. Fixo o camiño máis longo co ano extra que houbo». Y después, al ciclo olímpico que comenzó tras no cumplir las expectativas en su primera cita paralímpica, en Río, una espina que admitió haberse quitado en Tokio. «Daquela non estaba como agora, pero si pensaba estar pelexando polos postos de diante e quedei un pouco lonxe. Cando cheguei aquí hai cinco anos estaba a miña familia, o presidente da Federación e pouco máis», rememoraba.

Haber vivido aquello hace que Susana valore todavía más lo que ha logrado ahora. «Nós sabemos que adestramos moito e podemos atoparnos moi ben, pero chega o día da carreira e poden pasar mil cousas», recordó. Por eso, desde su posición de campeona, quiso acordarse de los que no llegan tan alto. «Hai que valorar a todos os deportistas que están nos Xogos tanto cando as cousas van ben, como me pasou a min esta vez, e cando non é así, porque medallas hai moi poucas e deportistas que chegan para gañalas hai moitos», apuntó.

 

La presión de ser favorita

Rememorar la prueba en la que se impuso junto a Sara Loehr es sinónimo de emoción. Y la impresión de Susana es que eso tardará tiempo en cambiar. «Non o vou esquecer nunca. Pode pasar unha vez na vida, dúas ou ningunha. Foi súper intenso», detalló. Tampoco ocultó que sentía presión por haber un buen papel, conocedora de las expectativas que había generado. «A Río fun a vivir os Xogos, pero a Tokio, aínda que tamén fun a disfrutar, ía con bastante presión», recordando que los resultados en los últimos años, como en esta misma temporada, la colocaban como favorita para el triunfo. «Todo o mundo pensaba nesta medalla, pero eu sempre teño claro, e o meu adestrador sempre mo recorda, que as carreiras acaban na liña de meta», precisó.

Agradecida por el «bum» que ha generado su oro paralímpico, explicó que se trata de un «soño cumprido» para ella. Y no uno cualquiera. «É o soño máis grande para un deportista. A sensación de felicidade que tes é unha pasada», expresó. Fue cuando se subió a lo más alto del podio cuando empezó a tomar conciencia de lo que había logrado. «Aí decateime da que liamos. É algo inmenso. Moitas veces pensei que me gustaría gañar unha medalla nos xogos e fun a Tokio a iso, a preparación foi brutal, pero despois a realidade supera iso», comentó con ganas de celebrarlo con los suyos tras vivir la experiencia sin ellos. «Nin familia, nin amigos nin adestrador puideron ir e agora é momento de ter todo iso», añadió pensando en los próximos días con los suyos.

Un diploma sumado al oro

Susana Rodríguez hizo historia al participar en dos disciplinas distintas en estos Juegos Paralímpicos y al oro en paratriatlón le sumó un diploma en los 1.500 metros. Aunque este quede en un segundo plano al haber subido previamente al primer cajón del podio, para ella sí tiene un gran valor. «Para min vale moitísimo por distintas razóns. Unha, que non é sinxelo clasificar en dúas modalidades tan diferentes», comenzó. El segundo motivo es que, tras el esfuerzo del paratriatlón, fue capaz de hacer marca personal y récord de España en semifinales y meterse en la final rodeada de especialistas y defendiéndose cerca de su marca en la final, «unha carreira moi rápida que se gañou con récord do mundo».

Orgullosa de poder decir sobre la prueba de atletismo que lo que quedaba de ella lo dejó allí, el tercer motivo tiene nombre propio: su guía Celso Comesaña. «Compartino con el, que é un dos meus guías aquí, en Vigo, co que adestro moi seguido e que é un amigo. Poder vivir isto con el é moi especial», señaló.

El futuro tendrá que esperar

Preguntada por el futuro, Susana señalaba a quienes la esperaban en el exterior de la terminal. «O futuro está aí fóra. Despois, creo que fai falta tempo. Os Xogos son esixentes a nivel físico e mental e agora necesito unhas semanas para procesar todo e pensar. Ese futuro ao que vos referides (París 2024) está por decidir», dijo. Al mismo tiempo, confirmó que terminará la temporada. El Europeo le espera este mes y el Mundial, en noviembre.