Porque Peleteiro es capaz de participar en un programa de retos en televisión y de dar las campanadas de fin de año en la TVG con la misma cara de felicidad y con la misma seguridad que cuando enfila el pasillo en busca de un salto ganador. Le encanta la moda, ha sido portada de revistas e imagen de más de una marca para sus campañas publicitarias. Un rol que no juega ningún otro atleta a nivel español.
«A ella le gusta mucho estar en los medios y en la televisión, se come la cámara, no tiene ningún reparo en decir las cosas con naturalidad y eso a la gente le gusta», comenta María José Martínez Patiño, que considera que a sus 25 años sigue manteniendo el mismo desparpajo que tenía de niña, cuando era una esponja que solo quería empaparse de todo el atletismo. Aunque más madura y receptiva ahora, Ana Peleteiro no ha cambiado, por mucho que se fuera de Ribeira siendo todavía muy joven para instalarse en la Residencia Blume -en donde conoció a Ray Zapata, también medallista ayer en Tokio en gimnasia artística y al que considera casi un hermano- o a vivir durante una temporada en Portugal.