La Eslovenia de Doncic condena a España a jugársela en cuartos con los EE.UU. de Kevin Durant

Pablo Penedo Vázquez
Pablo Penedo REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

Fernando Bizerra

Los de Scariolo no lograron cerrar el partido en un tercer cuarto que dominaron de 12 y perdieron 87-95 en el cara o cruz final

01 ago 2021 . Actualizado a las 19:45 h.

España deberá partirse la cara con los EE.UU. mañana, desde las 6.40, en el peor escenario de cuartos de final masculinos de los Juegos. Los de Scariolo pagaron en el sorteo el peaje de su derrota, 87-95, en el duelo de titanes con Eslovenia por el primer puesto del Grupo C. El equipo balcánico acabó exprimiendo la magia de un Luka Doncic discreto en la anotación (12 puntos) pero desatado en todo lo demás en la segunda parte — 14 rebotes y 9 asistencias—, demostrando los de Sekulic ser mucho más que su estrella. El desenlace dio a Doncic ganador a los puntos en su duelo de líderes con, un otra vez, gran Ricky Rubio.

Fue un primer cuarto soñado para España. El campeón del mundo y la mejor defensa en Tokio frenaba en seco a la campeona de Europa y mejor ataque en los Juegos. La clave, cómo no, encontrar la tecla para anular al nuevo enfant terrible del baloncesto mundial. Una caja y uno, con un excelso Claver sobre Doncic, desactivó por completo a la estrella de los Mavericks, que acabó el primer acto desquiciado, encarándose con los árbitros con el peso de tres faltas y 4 paupérrimos puntos.

El juego coral de España y el éxito del plan defensivo de Scariolo sobre el 77 esloveno llevó al 19-13; justo después de que Ricky, brújula del equipo, le sacase la segunda falta a Doncic bajo el aro hispano. En poco más de nueve minutos de juego el esloveno veía la tercera, un calco de la segunda, solo que con Abrines como el espabilado bien plantado en el suelo frente a su penetración. Cancar se ocupó de rellenar el vacío anotador en las filas balcánicas —22 puntos, mejor registro del partido—. Primer asalto: 24-20.

A Eslovenia no le quedó otra que volver a pista sin su faro. Parecía la ocasión perfecta para los de Scariolo de asfaltar el camino hacia una ventaja cómoda para cuando Doncic volviera. Pero sin claridad en ataque y lentos en su aro, se hallaron dos triples de los de Sekulic de salida, 24-26. Con eso y dos tiros libres se bastó Eslovenia para apretar las ajustadas costuras del duelo hasta la vuelta de su líder, ya mediado el cuarto. Bueno, con eso y con su dominio del rebote, capitaneada por el pívot estadounidense del Valencia Mike Tobey. Al descanso, 44-41.

Lo que pudo ser y no fue

Un triple de Abalde, confirmado en el quinteto titular y escudero de lujo de Ricky con 14 puntos, abrió el tercer cuarto y la mejor fase española. El tiro exterior aupó a los de Scariolo, que con un parcial de 11-2 alcanzaron la máxima del choque, 55-43. Pero mediado el tercer acto la versión mvp de Doncic se personó al partido, con un triple como prólogo (57-50) de un clínic de rebote y reparto de juego.

Pese a anotar con relativa fluidez, España empezó a desangrarse en ambas zonas, y permitió que un secundario como Dimec comandase con 6 puntos fáciles la revuelta eslovena: 68-68 y vuelta a empezar. Dos tiros libres de Llull cerraban el tercer acto 70-68.

El encuentro enfilaba el final según el guion previsto. Igualdad extrema. La cosa no parecía pintar mal para España, que había dejado a una desconocida Eslovenia en 68 puntos en tres cuartos. Y mejor se le ponía cuando Abalde y Pau firmaban el 82-76 a 6,22 del final encadenando dos triples. Pero un tiempo muerto del seleccionador balcánico, sumado a una técnica por la coincidencia de seis jugadores hispanos en cancha, inició el despegue final de Eslovenia.

Con un 0-7 los de Doncic recuperaron el mando, solo poco después de que Scariolo tuviese a bien devolver a pista a Ricky, ausente hasta entonces en el cuarto decisivo. Una penetración y un tiro libre del de El Masnou dio la última ventaja a España, 85-83, a 2,51. El aro escupió un tiro de Claver bajo canasta con 85-86 y Tobey machacó en la acción siguiente poniendo 3 arriba a Eslovenia por primera vez a 1,39. Ricky recortó, 87-88, pero el triple de Abalde a 18 segundos, solo, no quiso entrar. Llegó el carrusel de faltas tácticas y Eslovenia lo solventó sin despeinarse, cerrando el partido con su mayor ventaja: 87-95.